CARDIOLOGÍA PARA TODOS
Como mantener el corazón sano en época de pandemia
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“El secreto de la longevidad y la buena salud es la prevención. Haga los cambios que sean necesarios en su estilo de vida para fomentar la buena salud en el futuro”. (Dr. Danton A. Cooley).
El corazón es una bomba que impulsa la sangre hacia los órganos, tejidos y células del organismo. Suministra el oxígeno y los nutrientes a cada célula y recoge el dióxido de carbono y las sustancias de desecho producidas por esas células.
Las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la principal causa de muerte en gran parte del mundo. En EEUU muere una persona por enfermedad cardiovascular cada 24 segundos, es decir 2,400 personas por día, más que el cáncer, la diabetes y los accidentes juntos.
Los factores de riesgo son conocidos como condiciones que influyen significativamente en la probabilidad de que una persona padezca una enfermedad cardiovascular. Algunos factores como la edad, el sexo y la herencia no pueden ser modificados, otros en cambio sí y son aquellos relacionados con el estilo de vida. “Los estudios médicos han demostrado que es posible reducir el riesgo cardiovascular llevando una dieta baja en grasas, sal y colesterol, no consumiendo ningún tipo de tabaco, haciendo ejercicio por lo menos 3 veces por semana, manteniendo un peso saludable y controlar la presión arterial”.
Debemos hacer ejercicio aeróbicos (caminatas rápidas, trote o ciclismo) por lo menos 3 veces por semana durante 30 minutos. El ejercicio quema calorías, reduce el apetito, la presión arterial y el estrés y eleva el nivel del colesterol bueno (HDL), también mejora la figura y aumenta la autoestima.
En relación a la alimentación, algunos cambios sencillos y sensatos en nuestra dieta nos ayudan a controlar los factores de riesgo. Los hábitos sanos incluyen: Limitar el consumo de sal diaria a un máximo de una cucharadita (6 gramos) igual a 2,400 miligramos de sodio.
La dieta debe consistir principalmente en frutas, verduras, cereales, carne magra y pescado. Se aconseja reducir el consumo de grasas especialmente grasas saturadas y colesterol (carnes rojas, leche entera, quesos elaborados con leche entera, platos a base de cremas y postres que contengan muchas grasas).
El autor es Asesor Asociación
Instituto Dominicano de Cardiología.