Una gran decisión, Presidente
El Estado de Israel no termina nunca de sorprendernos con noticias de suma relevancia, esta vez nos encontramos con nuevos titulares. Israel ha alcanzado recientemente importantes logros en su política exterior, formando parte del Accord Abraham; que se fundamenta en el diálogo interreligioso y cultural, para promover la paz entre las tres religiones abrahámicas y toda la humanidad.
Este acuerdo llega en gran medida, dado el apoyo que siempre ha tenido de su más cercano aliado, los Estados Unidos. Para hacerse la idea, cabe destacar que, al realizar su primer viaje oficial, el 19 de mayo de 2017, el presidente Donald Trump partió desde Washington, D.C., primero a Arabia Saudita y luego a Israel, donde como Decano del cuerpo diplomático en el Estado de Israel, tuve el honor junto al Primer Ministro israelí Benjamín Netanyahu, de recibir y escuchar su plan de establecer un nuevo Acuerdo de Paz en Oriente Medio.
En ese sentido, tenemos a una administración Trump, que ha promovido este plan trascendental desde su inicio como presidente. Dicho acuerdo logró establecer un encuentro en la Casa Blanca, con la firma del establecimiento de relaciones entre los Emiratos Árabes Unidos e Israel, al que luego se suman Sudan y Bahréin. El nuevo Plan indicaba un cambio en la Política Exterior de Medio Oriente, siendo un hito histórico, la decisión, de Estados Unidos de mover su Embajada a Jerusalén, reconocimiento de facto a dicha ciudad como capital de Israel, el 14 de mayo de 2018.
Esta no era la primera vez que Estados Unidos intentaba esta hazaña; el 24 de octubre del 1995, el Senado y la Cámara de Representantes norteamericanos, aprobaron con una mayoría que la Embajada Americana en Israel fuese transferida de Tel Aviv a Jerusalén a partir de mayo de 1999.
En el marco de lo anteriormente expresado, es de importancia destacar que, las relaciones de esta importante nación en Medio Oriente con la República Dominicana han crecido entorno a históricos lazos de amistad. Durante mi curul en Israel, a menudo orgullosamente escuchaba en todos los discursos y memorias de ese país, el papel de esta nación caribeña, durante la Conferencia convocada en julio 1938 por el presidente Roosevelt, en Evian, Francia; donde solo la República Dominicana, aceptó dar el apoyo firme para recibir los inmigrantes judíos que huían de la Alemania nazi y el apoyo decisivo en el voto a favor en las Naciones Unidas a la creación del Estado de Israel.
La reciente consideración de la administración del presidente Abinader, de trasladar la Embajada de la República Dominicana desde Tel Aviv a Jerusalén, como fuese anunciada por el Canciller Roberto Álvarez, no solo es justa, sino atinada y responsable, pues en gran manera fortalece los lazos de real amistad, la cooperación y la inversión entre ambos pueblos.¡¡Enhorabuena!!