Una gran experiencia

El paso por la administración pública deja grandes expe­riencias en el plano humano, sobre todo cuando uno perci­be la mala transformación del individuo que recibe la oportunidad de no fallarle al pueblo que lo escogió. Quie­ro filosofar un poco en el significado de aprovechar la vida, no por su duración en el tiempo, sino por lo que debe utilizar­se de ella para quedar con gratitud en el corazón de la gente, y sobre todo, en el espacio de una conciencia libre de incon­ductas deshonestas, con limpieza y trans­parencia de una labor en defensa de los intereses de los demás. En estas inspira­ciones al margen de expresiones estériles y materialistas, pensamos que una muer­te noble es mejor que una vida de indig­nidad, pues vivir como debes te dará más satisfacciones, porque mientras tu vida valga más para los demás que tu muer­te, te preservarás más por tus acciones. Quien te dio la vida como una bendición quedará satisfecho de la capacidad con que lograste tus frutos. El triunfo no es para sí mismo, sino para el bien que pue­das hacer a los demás.