AGENDA SOCIAL
El voto en el exterior
Es una gran mentira que el partido de Gobierno tenga interés de que no se realicen los comicios en el exterior, porque supuestamente no obtendríamos el favor de los dominicanos que conforman la diáspora dominicana. Es una falacia más de sectores opositores que quieren adjudicarle al Partido de la Liberación Dominicana, una cuestión que es responsabilidad del órgano que organiza los comicios.
Los resultados del 2016 hablan por si solos. En la primera circunscripción del voto en el exterior, el PLD sacó 45,455 votos, frente a los 35,495 que sacó el Partido Revolucionario Moderno. En la segunda circunscripción, el PLD se erigió como ganador con 20,693 votos, frente a los 11,646 votos del PRM. Y en la tercera circunscripción el PLD ganó con 20,724 votos, frente a apenas 6,836 votos que sacó el PRM. En consecuencia, el alegato de que el PLD teme perder el voto en el exterior carece de cualquier fundamento y solo responde a las maquinaciones de la oposición.
El Partido de la Liberación Dominicana siempre ha sido un aliado de los derechos de la comunidad de dominicanos en el exterior, desde que en el año 1997 se estableció el voto en el exterior en la Ley Electoral.
Ese compromiso se hizo más evidente con la modificación constitucional del año 2010, que estableció la figura de Diputado de Ultramar, para que la diáspora dominicana y sus intereses estén debidamente representados en el Congreso Nacional, tomando en cuenta que la suma de la población dominicana que vive en el exterior equivale a una de las provincias más habitadas del país.
Incluso, el Partido de la Liberación Dominicana siempre ha tenido la protección de nuestra diáspora como uno de los fundamentos de la línea política partidaria. El profesor Juan Bosch siempre privilegió las acciones que buscaban fortalecer las seccionales del Partido en las grandes urbes del mundo hacia donde han emigrado los dominicanos.
Una muestra de ello son las innumerables cartas que intercambió con el extinto Juan Francisco Santamaría, fundador y organizador del PLD en París y en gran parte de Europa, en la colmena de las ideas revolucionarias, desde donde se forjaron relaciones internacionales de alta calidad que, al momento de llegar al gobierno en 1996, rindieron grandes frutos para el bienestar del país.
Ese tejido que construyó el PLD en los países donde hay presencia de dominicanos, sirvió para poner en relieve las necesidades y los reclamos de la diáspora, para lo cual el PLD creó el entramado institucional una vez en el Gobierno, que ha permitido dar respuesta efectiva a las aspiraciones de quienes han emigrado. En suma, se ha trabajado para que nuestra diáspora también se sienta parte del desarrollo económico y el bienestar de nuestro país.
En consecuencia, a los que quieren engañar a la población diciendo que el PLD no quiere que se realice en el voto del exterior, hay que recordarles las palabras de don Juan, cuando decía que “el hombre completo no denigra, no falsea, no miente para beneficiarse o perjudicar a los otros”, muy por el contrario, al PLD hay que reconocerle que es el partido que más ha trabajado por la diáspora, para que sientan orgullo de su país y quieren regresar a disfrutar de las bonanzas de esta patria.