COLABORACIÓN
Fallas contínuas obstaculizan la contención del coronavirus
Unos abogan para que las reservas internacionales netas (RIN) se mantengan altas a fin de evitar una depreciación abrupta del tipo de cambio.
Otros piden que no toquemos los fondos de pensiones porque es el ahorro de los trabajadores para asegurar su futuro y podría generar más daños que beneficios.
No faltan los que advierten que la deuda solo se debe dejar de pagar bajo negociación con los organismos multilaterales y jamás fallar con los tenedores de bonos.
Y algunos criticaron la emisión de inorgánicos, porque en el pasado fue la raíz de grandes desajustes económicos que nos obligaron a firmar acuerdos stand by con el del FMI que causaron mucho sufrimiento entre los dominicanos.
Casi todos estamos de acuerdo con todo. Pero amigos míos, aquí no se trata de lo que nos guste hacer o no. Se trata de que ni el FMI, el BM, el BCE, los genios de las universidades mas prestigiosas del mundo y los guros de los mercados financieros, saben hasta donde puede hundirse la economía por el coronavirus. Todas son estimaciones y supuestos.
Estamos en un punto donde hay señales positivas del control de la enfermedad, caso de China, pero al mismo tiempo muchos otros países apenas están en la fase inicial de la expansión comunitaria.
Hay países que están combatiendo la pandemia con éxito y otros cometen fallas continuas que obstaculizan su contención.
Por ejemplo, nuestro país está manejando el tema coronavirus con poca efectividad, donde el bajo número de pruebas subestima la cantidad real de infectados. Tampoco hay transparencia en las adquisiciones de materiales y medicamentos para combatir el Covid-19. Siempre la corrupción se impone.
También se politizan las acciones para ayudar a la gente a sobrevivir, lo que convierte la distribución de alimentos en un circo humillante y de mal gusto. Y para colmo, denigran todo lo que ofrecen los partidos de oposición, como si fueran donaciones venenosas.
Se habla de reabrir la economía, pero el número de infectado sigue creciendo porque las medidas de contención y aislamiento han sido un lamentable fiasco.
Si nos descuidamos y el gobierno sigue actuando como el detective, el guionista, el productor y el director de la película, podría llegar el momento en que lo que nadie quiere que se haga se convierta en realidad.