¿Sangre nueva para la corrupción?

El anuncio de la inyección de sangre nueva al PLD no podía ser más ridículo para la opinión ciudadana que lo escuchó a viva voz de Danilo Medina la noche que dio el brazo a torcer. Ese anuncio ha rebotado sobre su autor de mil maneras en las calles y los medios masivos provocando sátiras y reacciones de todos los colores y tonalidades. Los autoproclamados a la candidatura morada están de vuelta y media en una cerrada competencia de poses buscando cámaras. En la otra acera morada aspiran hasta el 2044, aunque no dicen si se van por el camino viejo o uno nuevo. Mientras tanto, harán rifas por un tubo. Ninguna felicitación para los riferos, que ya gobernaron durante tres períodos.