En el ruedo internacional

Preocupante fuera que el país no tuviera relaciones exteriores y se desenvolviera en el plano internacional como veleta, según la dirección del viento. O que teniendo la posibilidad de figurar y ser decisivo, arrumbara la oportunidad.

Sin embargo, parece estar en su mejor momento. Ninguna potencia lo cerca, lo presiona, lo obliga, sino que sentado a la mesa de los grandes, tiene derecho a voltear sus cartas, o dejar alguna en la manga, y hacer su juego.

Moviéndose entre China y Estados Unidos, y siendo parte de decisiones importantes en el Consejo de Seguridad, no puede pasarle nada malo. Circunstancia a pedir de boca. Además de ser una diplomacia directa, personal. Danilo Medina conoció y trató con Xi Jinping, el líder chino, con aparente buen resultado. Por lo menos en cuanto a tabaco y ron.

Ahora con Donald Trump, y viendo el encuentro en perspectiva, habría más interés de Estados Unidos que de República Dominicana. Un evidente cambio de situación.

Cuando el grande necesita del pequeño, el pequeño se hace grande. Y no olvidar que quien invita, paga. Dicen que el tema China estará por encima de Venezuela, pero con Trump nunca se sabe. Dependerá del humor y del primer tuit del día. En Todo caso, conviene ser parte de cualquier solución. Si Estados Unidos quiere ocuparse del llamado patio, aprovecha que tenga en cuenta a República Dominicana.

Con Venezuela - por demás - el país lleva jugada todas las bases, y como no debe, puede manejarse con independencia, pensando en sus intereses y no en la solidaridad que ya en estos tiempos importa poco.Si Nicolás Maduro y compartes se metieron en un callejón que solo tiene una salida, y la controla Estados Unidos, que se encomiende a Dios y no esperen de los restantes países de América.

Con China sería distinto. Como existen ventajas de por medio, la experiencia dominicana no tiene que ser la norteamericana. El gigante asiático busca extender su dominio, compra espacio y solo podría haber entendimiento si USA iguala la oferta. El hecho de que no solo se haya convocado a República Dominicana, sino también a otros de la región, significa que la circunstancia se maneja con criterio colectivo.

No se conoce la actitud ni la real política de Danilo Medina, pero incluir en la delegación a un Fanjul debe interpretarse como blindaje.

Una política regional o internacional de picardías.