Opinión

PUNTO DE MIRA

Bomba atómica china cambió el mundo

En 1964 China detonó una bomba atómica. La fuerza de la explosión derribó las puertas que la mantenían aislada y sacó de la ONU la silla que ocupaba Taiwán con el apoyo de los Estados Unidos. La correlación de fuerzas había cambiado por el nacimiento de una nueva potencia.

Las tesis de Mao que acusaban a los rusos de alejarse del marxismo fueron exactas. La Cortina de Hierro se derrumbó, pero también las ideas del líder comunista chino se las llevó la brisa de la realidad.

Paradójicamente, el crecimiento de la República Popular China la enfrentó a la Unión Soviética y la acercó a Norteamérica. Mao y Richard Nixon iniciaron unas relaciones que facilitaron el intercambio comercial y el desarrollo chino bajo el esquema de la economía socialista de mercado. Un singular socialismo que parece avanzar hacia el capitalismo. Sin embargo, en estos días parece que nuevos cambios soplan en el mundo. La ascensión al poder de Donald Trump, a quien se acusa de haber ganado el poder por la injerencia de los rusos, parece estar dibujando un nuevo mapamundi comercial. Aunque Estados Unidos tiene grandes deudas con la RPCh, el tema de Corea del Norte parece enturbiar las aguas del Mar de China. En el pasado este suelo fue escenario de los combates entre soldados de ambos países. Norteamérica soportaba a Corea del Sur y China los del Norte. Los americanos perdieron la lid y esa espina parece haber quedado. Los tambores de guerra se escuchan en tono bajo. La industria militar azuza y proyectiles de uno y otro signo se lanzan en las bravatas. En Rusia los militares desfilan celebrando victorias del pasado: los americanos prueban nuevas armas; los norcoreanos agitan las plumas como gallo en corral propio, y ayer China lanza un nuevo proyectil desde el mar de Bohai, cerca de la tensa península coreana. El anuncio del proyectil chino se hace cónsono con la elección de nuevo presidente de Corea del Sur, país donde los norteamericanos proclaman haber establecido un escudo antimisiles que la República Popular rechaza y reclama su eliminación por entender que afecta su soberanía, y advirtió que tomaría todas las medidas necesarias para defender sus intereses.

Entre tanto, los chinos aumentan su ayuda a los países africanos y venden buques de guerra a Malasia que se aleja de EEUU. Hay calistenia militarista en el Mar de China.

Tags relacionados