Una reflexión de actualidad
¿Cómo es posible que al día de hoy sigamos propiciando que la más vieja escuela fundada a pocos años del descubrimiento de nuestra América, los partidos políticos utilicen nuestro primer monumento, sagrado por demás Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD)?
Para su usufructo particular, y como plataforma proselitista para impulsar desde allí su campaña política.
¿Cómo es que al día de hoy las altas autoridades, entiéndase, rector, decanos, profesores y otros altos administradores de nuestra alta casa de estudios permitan que estos bisoños, e improvisados dirigentes políticos, enquistados o enganchados en su mayoría, en facciones partidistas, a que nuestra universidad sea y seguirá siendo, ya no un centro académico científico, sino, un anfiteatro para políticos y poltiqueros, los cuales no acogen ningún interés en que nuestra sociedad avance y se capacite profesionalmente.
¿Hasta cuándo tendremos rectores sobornados por los partidos políticos, para que con ellos permitan que los bachilleres sean los que dirijan y procurando prebendas políticas caoticen nuestra universidad?
¡La Primada de América!
La que cada día ve apagar sus luces que brillantemente exhibió medio siglo atrás.
Yo digo ¡Qué lastima!
Que lastima que los dirigentes de las últimas décadas, algunos honorables, profesionales a la hora de ser electos, estos, rectores, administradores, se hayan contaminado con los intereses de los partidos políticos y también con el afán de lucro material como son las prebendas mercuriales.
La entrega cristiana y desenfadada “Filantropía” hoy brilla por su ausencia ¡Adiós mi querido profesor de otrora! Entiéndase de otros tiempos.
Adiós a la dignidad y al decoro, alcanzar méritos para dirigir nuestra universidad, y adquirir por capacidad y entrega, el derecho a ser proclamado como ejemplo, “como modelo”, estos son valores hoy día extintos.
Permitir que estos bachilleres tomen los cuarteles universitarios y pasen a ser los gerentes del caos político estudiantil, entiendo y propugno porque nuestra universidad deje de ser un centro o cuartel, rememorando así aquellos viejos tiempos del perredeísmo en los tiempos del Balaguerismo, y otras fuerzas emergentes de aquellos tiempos, las cuales pugnaban ponerse al frente de las fuerzas estudiantiles de la época.
Hoy día esos dirigentes, son un bachiller que proviene o emerge de un proyecto político determinado.
Quien acuña esta modesta, más así sentida reflexión no es alguien, ni egresado de la UASD, tampoco de altas academias, es una persona modesta, como así es su nombre, Víctor Modesto. El cual hace uso de su derecho cívico como ente contribuyente en nuestra sociedad, por tal derecho, el cual me faculta para emitir mi opinión, mucho más, cuando esta procura poner en alerta los intereses de la nación, y lograr que lo que hoy están al frente de la universidad, se autocuestionen, y dejen de ser utilizados como tontos útiles de los políticos, sean estos blancos, morados, verdes, rojos, amarillos, rosados, azules o índigos.