“Se echó al monte la utopía”

Por una democracia en apuros (Oportunidades y decisiones) Mientras pasa la lluvia, -ese llanto de la naturaleza que nuestra pobreza convierte en desastre natural y tragedia-, nos hemos encontrado esta semana con buenas noticias que son buenas oportunidades, decisiones por tomar. Y es que no sólo la utopía de Serrat se ha echado al monte, también se ha echado pero a las calles, una ciudadanía que apuesta al fin de corrupción, de la impunidad y al fortalecimiento institucional... y ahí están Los Verdes. O sea, que tanto fue el cántaro de silencio y lejanía al río de los problemas nacionales sin castigo, hasta que se rompió. Y por ahí andan logrando pacíficamente en las calles, lo que partidos políticos grandes y pequeños, de izquierda o de derechas, mendigos del erario o promovidos por los príncipes del capital y La Embajada, no habían logrado.

La tentación Ahora, queda pendiente saber si los verdes van a resistir la tentación de escuchar a ese “locoviejismo” militante, anclado en la guerra fría, que apuesta a derrumbarlo todo para que nada cambie o empeore, olvidando que a quienes hay que derrotar no es a los ricos por ricos sino a la pobreza por malvada. Hablo de unos señores incapaces de concitar el apoyo de Hondo valle, Barrio lindo o Aguas frías, y que están en todas menos en la misa martiana por aquello de que “la mejor forma de decir es hacer”, ni tampoco en la sagrada eucaristía de fray Ernesto -Monseñor- Guevara, para quien un revolucionario debía ser sobre todo ejemplo. De esos testaferros del cinismo, profetas del naufragio, termocefálicos del partido o la religión, de ellos han de salvarse los verdes, si quieren lograr que el poder político entienda que 56 años de impunidad es “demasiadamucha” impunidad, que lo mucho “hasta Dios lo ve”.

Buenas, nuevas y cristianas noticias Precisamente, y en una demostración más de que Dios “aprieta pero no ahoga, esta misma semana nos han llegado dos buenas noticias: El próximo jueves se inician las discusiones internas en la comisión bicameral del Congreso para estudiar los proyectos de Ley de Partidos y de Régimen Electoral, y el día 15 de este mes, el Presidente de la República ha convidado al Consejo Nacional de la Magistratura para, entre otras cosas, sustituir por diferentes razones a unos diez miembros de la altas cortes, incluido el Tribunal Superior Electoral completo. Otra gran oportunidad para que el santo gobierno y el sector peledeísta que ahora tiene la antorcha en esa organización, resistiendo la tentación, muestren sus mejores credenciales democráticas eligiendo para esas cortes, a magistrados cuyo común denominador sea el buen talante personal y profesional, la demostrada vocación de servicio durante toda su vida, y una relativa independencia de los partidos y grupos empresariales, que a la hora de tomar una decisión les permita seguir solo los mandatos de su conciencia. Como ven, son buenas noticias para y por la salud de esta desprestigiada y débil, “flaca, chueca, fané y descangallada” democracia que es la única que tenemos y debemos mejorar. Y recuerden: Para tenerle paciencia a la democracia y sus miserias, nada mejor que recordar la dictadura y sus oprobios.