UMBRAL
Elecciones en Ecuador
Rafael Correa está arribando al final de su gestión con un legado que ha puesto a Ecuador en el camino de la institucionalidad democrática, la estabilidad política, social y económica, a pesar de la desaceleración de la economía provocada por el desplome de los precios del barril de petróleo que ha golpeado a los países que tienen como una de sus fuentes fundamentales para el ingreso de divisas al crudo.
Llegó en medio de la volatilidad política que impedía el fortalecimiento de las instituciones públicas, que había erosionado la credibilidad de las formaciones políticas y, por tanto, lastimado al sistema de partidos que he vuelto a reconstruirse, al punto que los últimos procesos electorales se han desarrollado con la normalidad que le es consustancial al sistema democrático, por ello, a pocos días de la celebración del evento comicial en el que se escogerá al sustituto de Correa, no hay sobresaltos.
Siete hombres y una mujer aspiran a la presidencia de la República; Lenin Moreno, de Alianza País, del partido de Correa, marca como preferido en las encuestas que miden las intenciones del voto; está colocado en un 34,3 % y su más cercano contendor es Guillermo Lasso, que va de candidato por la alianza CREO/SUMA, y registra un 22,9 %. La socialcristiana Cynthia Fernanda Viteri ha crecido en simpatías en los últimos meses para colocarse en un 11,4 %, y Paco Moncayo, que es postulado por una alianza de tres formaciones de izquierda, se ha logrado posicionar en el 7,5 % ; los demás están por debajo de estos porcentajes.
He sido testigo del avance que en materia política, de institucionalidad democrática y electoral ha alcanzado este país en los últimos 10 años.
Los cambios que se han producido en la administración del líder de la Revolución Ciudadana han encaminado a Ecuador hacia la modernidad, la inclusión y la transparencia.
La paridad de género y la alternabilidad, son conceptos que rebasaron las intenciones y se constitucionalizaron, por ello cerca de la mitad de los candidatos a puestos electivos son mujeres, por ello el presidente del Consejo Nacional Electoral, CNE, Juan Pablo Pozo tiene 34 años de edad, y la presidenta de la Asamblea Nacional 33.
El propio Pozo, en conversación que sostuvimos en el marco del montaje de la observación electoral dijo que hace 10 años en Ecuador se dio un salto generacional que ha ido convirtiendo en cultural la alternabilidad y los que dirigen van entendiendo que los ciclos se agotan. Y en efecto, se agotan para dar paso a los cambios de ideas y visión del mundo, que muchas veces vienen de la mano del agotamiento biológico, aunque no siempre es así, porque no necesariamente los cambios están relacionados con la edad.
Como parte de los avances institucionales y de afi anzamiento democrático Pozo mencionaba el hecho de que los jóvenes de 16 años tienen derecho al voto, igual que los privados de libertad sin sentencia condenatoria, por igual el denominado voto en casa para los envejecientes, el de los miembros de las fuerzas armadas y la policía y el fi nanciamiento de los partidos mediante un modelo en que las formaciones contratan su publicidad y el Consejo paga a los contratados porque los partidos no reciben dinero de forma directa.