PUNTO DE MIRA
Mirando a través de Hipólito
Todos los que esperamos un discurso para que Hipólito Mejía fijara su posición en torno a la candidatura presidencial del 2016 nos quedamos con el moño hecho. Lo que expresó sobre el tema es que estará en el lugar donde las mayorías y las circunstancias lo requieran. Nebulosa forma de ser claro. Agregó que defenderá el derecho de todos de elegir y ser elegidos, incluyendo a los aspirantes a la Presidencia de la República. Más confusión de quien ha pataleado para ser candidato presidencial. Hipólito habló de que su tarea ahora será promover como estructura a sus parciales perredeístas que ya están organizados a todos los niveles. Los llama “corriente mayoritaria perredeísta” olvidando que está vetado el nombre de PRD, porque es una marca registrada bajo control de Miguel Vargas. Sobre la Convergencia advirtió que no es un partido sino un espacio de unidad donde estarán todos los partidos que se les unan a sus planteamientos que abarcan un gran plan de gobierno que deberán agotar en varios períodos de gobierno. Si la Convergencia será un frente de partidos, Hipólito ocultó que uno de ellos sería el representante en la mesa electoral y los demás complementos del relleno. Hay mucha experiencia sobre el particular. Esos voticos serán absorbidos por quien ostente la representación. Hasta el momento la estructura de perredeístas, supuestamente organizados a nivel nacional e internacional, se presenta como un germen de partido que se propone derrotar al PLD en las próximas elecciones. Recuérdese que el partido de gobierno es actualmente la mayor fuerza política. En su reunión con el Grupo de Comunicación Corripio, Hipólito leyó una ringlera de puntos en los que descalificó las actuales estructuras del país para seguir adelante. Ningún tribunal sirve, ni siquiera la Junta Central Electoral. Este organismo, según dijo, debe ser blanco de un gran acuerdo político que la modifique para colocar allí a personas confiables para todos los partidos. Que podrían ser los partidarios de él, claro está. En tono enfático el líder de la Convergencia dijo que el PRD ya no existe, sólo quedan los verdaderos representantes del perredeísmo, que son los que conforman su grupo, como tiene que ser. Se creyó que Hipólito hablaría de la candidatura presidencial, pero se quedó en tintas. Era más fácil decir todo lo que dijo y apoyar a Luis Abinader. Pero teme quedarse solo.