Quebró la tertulia intelectual

La ausencia de voces de opinión sobre un libro de Leonte Brea asombra a Tony Raful. Tony se ha percatado de que el parnaso se llena de mugre. Sus vates han abandonado el oficio. El cubil del estro está en fase crítica. No hay mucho espacio para labrar el terreno intelectual. Lo más que puede Raful es optar por horadar en el pasado. Darse un baño de nostalgia. Todo tiempo pasado fue mejor. Volver a París en la Medianoche de Woody Allen. La obra “El Político, radiografía íntima”, de Leonte Brea González pudo haber sido un tejido de los pasillos matinales de un centro comercial donde la realidad presente ha llevado a los críticos y analistas del “universo nacional”. La sociedad dominicana ha dado varios cambios. Estamos en otra era que nos ha puesto patas arriba todo lo que conocíamos. Tenemos más cosas para conocer al alcance de los dedos. Podemos catapultarnos sin movernos, y saber lo que acaba de hacer el jefe de China hace unos minutos. Marco Polo ya hizo lo suyo. Vivimos en la sociedad de antigüedad automática. Todo tiene que ser más en todo: grande, rápido, nuevo, resistente. Ahora los acontecimientos son viejos antes de ocurrir. Las ideas nacen con siglos de edad. Es una locura la superficialidad y doble moral con que se viste la desvergüenza de nuestra sociedad mundial. Vivimos en un tiovivo ebrio que nos deja sin aliento. Ya carece de importancia tu vocación o moral. Si eres metrosexual apúrate, se está incubando otra designación para andrógino. Para escandalizar habrá que trasgredir la frontera de lo inexistente. Entre el vapor etílico de la navidad trato de encontrar un norte plausible para esta realidad agobiante. Viajo con mi tableta con Internet cedido por mi móvil para buscar a Leonte Brea y decirle que vivimos un mundo virtual, digital, sin archivo visible. Que ahora todas las bibliotecas del mundo están a corta distancia pero que no sirven de nada. Falta público. Es más ya no existen ni intelectuales. Libros y escritores toman otro curso. La generación que hizo los cambios se ha hundido en el intersticio de esta realidad. Sin embargo, no es para asustarse. Los cambios son inevitables. Es la dialéctica con su tozudez. Entramos en la otra vía de la elipsis. Leonte es termómetro del ambiente actual. La tertulia donde se cocinaban las espiritualidades quebró, Tony.