Santo Domingo y el entorno fronterizo dominico-haitiano
El general de Brigada, Santo Domingo Guerrero Clase, E.N., diplomado de Estado Mayor, actualmente director del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (CESFRONT), tiene un conocimiento cabal de lo que son nuestras fronteras, desde la desembocadura del río Dajabón hasta el extremo sur en donde desemboca el río Pedernales o de Anses a Pitre en el Mar de las Antillas.
En meses pasados tuve el privilegio de conocer las instalaciones en donde el Cesfront tiene las infraestructuras de la Escuela de Capacitación Fronteriza Terrestre, la cual tiene como lema “Honor, Legalidad, Lealtad y que opera en el Distrito Municipio de Capotillo, Loma de Cabrera, Provincia Dajabón.
Las instalaciones de todo el Campamento del CESFRONT, en sentido general, son modernas, bien mantenidas, que acusan de por sí una dirección efi ciente, una disciplina que se percibe al penetrar en el área del recinto y una capacidad en sus estamentos diligenciales que, evidentemente, garantizan los mejores resultados en el manejo de todos los asuntos que competen a nuestras fronteras.
Nos impresionó sobremanera la disposición de un Banco de Monitoreo accesible únicamente al personal adiestrado para su cuidado y manejo, desde donde se puede captar, en vivo, todo lo que al momento está aconteciendo en cualquier lugar de la región fronteriza.
Las aulas pertenecientes a la Escuela de Capacitación están dotadas de todos los adelantos modernos en informática y cuenta con un staff de profesores que avalan un producto con niveles de excelencia que garantizan al egresado un cumplimiento cabal y responsable en sus atribuciones. Es de rigor, para cualquiera de sus miembros, el conocimiento de todo lo concerniente a la línea de demarcación fronteriza; los instrumentos diplomáticos que la sustentan, la colocación de todas las pirámides, la disposición de todos los cursos de agua que conforman la frontera, la Carretera Internacional, el estudio del creole, etc. Están dotados de buena comunicación, equipos de visión nocturna, facilidades motorizadas para sus movimientos, buena alimentación y adecuada vestimenta; área de recreación para todo el personal y una franca y sincera camaradería reina en toda el área de ese prestigioso Centro de Adiestramiento, orgullo de nuestras FF.AA.
Cada soldado perteneciente a esta unidad lleva consigo una tarjeta orientada a pautar las normas de conducta y comportamiento, todo el tiempo. Es para un soldado de este cuerpo, lo que es el catecismo para un católico. El general Guerrero Clase, con el soporte de sus superiores está llevando a cabo una labor de remozamiento de todas las unidades militares fronterizas propias de ese cuerpo y un trabajo titánico en cuanto a su ordenamiento.
La frontera dominico-haitiana, desde tiempo inmemorial ha arrastrado una serie de malas costumbres, enquistadas en la cultura de esos pueblos que conforman la frontera y hacerle frente convierte la situación en una lucha de titanes. Eso lo está haciendo el general Clase con su equipo de hombres que muchas veces reciben acusaciones injustas de fuentes interesadas o de personas que ignoran la realidad a que se enfrentan día a día estos guardianes de nuestras fronteras.
El trabajo se está llevando a cabo y de la mejor forma posible.
Erradicarlo tomo tiempo, mucha dedicación, apoyo moral y logístico, y la comprensión de sectores que aún bien intencionados no logran comprender la complejidad de los procedimientos necesarios para lograr ese objetivo, y a eso está dedicado, a tiempo completo Santo Domingo y todo el equipo que conforma el CESFRONT.
Por último, me atrevo a sugerir, en mi condición de coronel retirado del Ejército Nacional, la idea de que toda la seguridad en el ámbito de nuestras fronteras, debía asumirla el Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza, en razón a que primero, son parte integral del Ejército Nacional, y que se adiestran precisamente para servir como guardianes de la frontera, y dos fuerzas, aún con igual origen, compartiendo una misma responsabilidad, pudieran, tal vez involuntariamente, crear situaciones que pudieran tocar el celo profesional y ello podría generar situaciones no deseadas.
Otra recomendación que me atrevo a formular es que las promociones de cadetes de infantería pertenecientes a la Academia Militar de las Fuerzas Armadas Batalla de las Carreras, al momento de iniciar el cuarto año, visiten las instalaciones del CESFRONT en la Escuela de Capacitación Fronteriza Terrestre, en Capotillo, en la seguridad de que sería una experiencia que enriquecería su carrera militar, especialmente en el aspecto histórico, pues tendría la oportunidad de conocer el Cerro de Capotillo y el Monumento erigido en recuerdo de esos Próceres de la Restauración, narrada por un Ofi cial Superior adscrito a ese Centro Educativo.
Páez es autor de “Relaciones dominico-haitianas: 300 años de historia” y “Frontera dominico- haitiana: 6 zonas-97 planos- 313 pirámides”.