MI PALESTRA
El embajador Medina
Hace años conocí a César Medina siendo reportero del desaparecido Última Hora donde me inicié en el periodismo al lado de mi inolvidable Gregorio García Castro, y donde tuve la oportunidad de tratar con brillantes periodistas, que fueron casi todos convirtiéndose en mis amigos hasta la fecha. El hoy flamante embajador en España, una de las plazas diplomáticas más importantes, es un hombre consagrado a su profesión, amable y consecuente, amigo de sus amigos a los que muchos vamos a perder en el país para que lo gane un servicio diplomático que indiscutiblemente ha avanzado y se ha adecentado en la pasada y presente gestión de gobierno del presidente Fernández, siendo titular de la Cancillería un hombre igualmente trabajador y entregado como lo es el Ing. Carlos Morales Troncoso, fiel al país y a las políticas del jefe de la diplomacia dominicana en tiempos en que estamos urgidos de la solidaridad y de la búsqueda de soluciones en conjunto a los grandes retos del presente y del futuro. Estamos seguros de que como en Chile, en España el colega y amigo será un gran representante de la patria que sabemos ama y respeta antes que nada, y por lo tanto amando y respetando a la patria se puede sentir y hacer indiscutiblemente un mejor trabajo al servicio de las mejores causas nacionales, porque no se va a una Embajada o a una posición a servirse sino a servir, y se es mejor y más entregado cuando se tiene una hoja de servicio a la patria como la tiene César Medina. Quizá en estos momentos muchos de sus amigos pensamos que es mejor tenerlo aquí, pero realmente Medina es un hombre que debe servirle a su patria, y la mejor forma es precisamente haciéndolo en representación del gobierno en playas extranjeras, en un ejercicio de diplomacia digno y respetuoso, sin otras intenciones que la de lograr lo mejor para el país. Enhorabuena amigo y colega de siempre.