"El sí más importante de la vida"

Wellington fue un joven a quien aprendí a querer. Responsable, trabajador, solidario, empático y con carisma. Por varios años se desempeñó como recepcionista en Listín Diario bajo mi supervisión, posición en la que se ganó el cariño y el respeto de todos sus compañeros.

Por varios años esperó la donación de un riñón para mejorar su calidad de vida, pero la lista de espera se hizo eterna y su condición de salud fue empeorando hasta que ya no pudo esperar más… y se fue.

Lamentablemente, en República Dominicana no tenemos desarrollada la cultura de donación de órganos tras el fallecimiento y miles de personas, como Wellington, pierden la vida esperando un trasplante.

A raíz de este triste momento que viví en detalle y de cerca, nació en mí el interés de investigar sobre el proceso de donación de órganos, y me documenté, espantando cualquier posibilidad de duda anclada en la desinformación sobre el protocolo correspondiente.

Hoy sé que cuando ya no esté en este mundo mis órganos pueden ayudar a salvar la vida de otras personas, y estoy convencida de que donar es el acto de generosidad más poderoso que podemos hacer.

El equipo del Instituto Nacional de Coordinación de Trasplante (Incort) hace un esfuerzo admirable por llevar a la ciudadanía información veraz sobre el proceso de donación con el objetivo de crear consciencia sobre la necesidad de que cada día sean más las personas que tomen la decisión de donar sus órganos tras su muerte.

Recientemente, el Incort presentó su nueva campaña "El sí más importante de la vida" para hacer un llamado de atención sobre la importancia que tiene el Programa Nacional de Donación y Trasplante.

El doctor Fernando Morales Billini, director del Incort, es un abanderado de la donación de órganos y no descansa en su tarea de lograr que algún día en nuestro país la estadística de los donantes pueda elevarse y las listas de espera lleguen a disminuir considerablemente, ofreciéndole una oportunidad de vida a quienes lo necesitan.

La falta de donantes de órganos es la principal causa de muerte de los pacientes que sufren una enfermedad terminal de uno de sus órganos. Y si algún día llegas a necesitar un órgano para salvar tu vida, seguro que dirías “sí” para recibirlo, entonces, es justo que también digas que “sí” para donarlo.

Yo te invito a que busques información en el Incort y derribemos los mitos sobre la donación. Toma la decisión, habla con tu familia, y anímate a pronunciar "El sí más importante de la vida", juntos podemos marcar la diferencia.

¡Hasta el lunes!