Noticias

De Cerca

En modo Shakira: valiente para comenzar de nuevo

Celeste Pérez

El divorcio es un momento difícil. No importa las causas que nos llevan a tomar la decisión, en ocasiones, esta es la medida necesaria para conservar la salud mental. Por respeto hacia uno mismo, a todo lo vivido y a lo que se ha construido juntos.

Nadie me lo ha contado. Lo viví. Y como Shakira tuve que dejar atrás muchas cosas para enfrentarme a una nueva etapa con un hijo en brazos.

“Las cosas no son siempre como las soñamos. A veces corremos, pero no llegamos…”, escribió la cantante colombiana en una de sus historias de Instagram, en la ventana del avión en el que se trasladaba junto a sus hijos desde Barcelona hasta Miami, tras su separación con el exfutbolista Gerard Piqué.

La comprendo. El divorcio es un duelo porque nos alejamos de esa persona que alguna vez fue especial y con quien convivimos, tuvimos expectativas y sueños. Y sin importar que tan fuerte puedas ser, atraviesas por la tristeza, el enojo, la frustración y un abanico incontrolable de emociones.

Desaprender para aprender

Siempre escuchamos sobre las mil formas de cómo llevar una relación sana a través de los años superando las adversidades y poniendo el amor en primer lugar; pero pocos nos comentan qué hacer si la relación no funciona y llega a su fin.

En el proceso, y tras muchas lágrimas y rabietas, asimilamos que se puede ser feliz nueva vez, aprendemos a encontrarnos con nosotros mismos, a perdonar y a perdonarnos, y a mejorar la relación con esa persona que - en algún momento - dejamos entrar a nuestra vida y, en muchas ocasiones, hasta procreamos hijos como resultado de lo que llamamos amor.

Hay que ser valiente para cerrar ese capítulo y empezar. Lamentablemente, en muchos casos el divorcio termina desatando una batalla donde parecería que gana el que más daño le puede provocar al otro.

Hay que ser valiente para superar la tristeza en cada recuerdo. De repente, compartir tu vida planificando un futuro juntos es un sueño que se quiebra, se destruye.

Llegué a tener la impresión de que la soledad me esperaba en la puerta. Me alejé de amigos, de lugares, de personas importantes de mi vida compartida y que ya no eran parte de esta nueva etapa, y los extrañaba... La custodia compartida agrega una dosis de soledad, porque hay ocasiones en las que te encuentras físicamente sola.

Otra oportunidad

Sin buscar culpables, solo nos resta aceptar que la relación se ha terminado, y que este proceso es también una nueva oportunidad para ser feliz.

Enfocarnos en recordar todo lo bueno ayuda a entender que las cosas pasan por un fin. La ruptura no tiene que ver con el valor que tienes como mujer. La separación puede ser un gran aprendizaje, aunque, cuando estás en medio, por lo general, no lo consideras una experiencia positiva. Con el paso del tiempo es posible mirar atrás y comprobar que el divorcio puede fermentar cambios internos que eran realmente necesarios.

Lo que yo aprendí

No te rindas sin probarlo todo para salvar tu matrimonio, pero recuerda que la vida es demasiado corta para estar en una relación en la que no te sientes plena.

Pierde el miedo, aprende a confiar en tus instintos y en la capacidad de hacer realidad los sueños.

No eres esa la persona que dice tu ex. Deja que todo fluya siempre segura de quién eres.

Tu ex tiene un alma gemela, pero esa no eres tú. Quizá te resulte difícil aceptar, pero alégrate si él se involucra en otra relación, no tendrá tiempo para molestarte.

No importa la edad que tengas, enamorarse de nuevo es posible. Mereces esa oportunidad y no pienses que todos los hombres son iguales.

La vida sigue, siéntete cómoda contigo misma. Si decides estar sola, no pasa nada.

Los niños serán felices. Esto depende de ambas partes, pero si se esfuerzan en tener una relación cordial todos salen ganando.

Se puede superar, yo lo hice, Shakira lo hará, y de seguro que tú también.

¡Hasta el lunes!