Gracias María de la Altagracia por tu amor

Las palabras no alcanzan para expresar la emoción que los dominicanos y dominicanas católicos, o no, hemos vivido con este cierre para celebrar el centenario de la coronación de nuestra Virgen de la Altagracia.

Fue increíble, el domingo cuando monseñor Jesús Castro obispo de Higuey entregara la imagen de nuestra protectora al Arzobispo de Santo Domingo Francisco Ozoria Acosta. Yo sentí que “Tatica”, como la llamamos los del Este del país, viniera a la capital a concedernos tantos milagros y favores. Eres soberana, patriótica, amorosa madre María de la Altagracia viniste revestida de esplendor. Se siente tu presencia divina en cada convocatoria. Hemos sido testigos y bendecidos de este acontecimiento histórico y desbordante de Gracia para el pueblo dominicano por la clausura de este Jubileo Altagraciano.

Ella nos une a todos

Quiero hablar en primera persona al agradecerle a Dios por haberme concedido ver la celebración de estos cien años de la coronación canónica de nuestra Virgen María de la Altagracia. Es una pena que las palabras no puedan transmitir los latidos de mi corazón y la emoción tan grande de sentir tu presencia en estas horas de visita de nuestra madre y soberana a nuestra ciudad de Santo Domingo. Ella que es la misma misericordia de todo lo creado nos une nuevamente en un solo corazón, sin importar si somos católicos o no. Ella nos está dando una Gracia muy especial.

Patriótica fiel

La Virgen María de la Altagracia está presente hasta en nuestra bandera la que lleva el color de tu manto. Es líder y madre nuestra señora. Después de 100 años ayúdanos a preservar nuestra fe, dándote las gracias porque a través de ti llegamos a tu hijo, cómo dice la canción “si tú nos miras Él nos mira” gracias madre buena por tu amor y piedad para este pueblo que te ama tanto.

Momentos irrepetibles

La entrada de la madre de Dios al Estadio fue algo que nadie olvidara. Se sintió un pueblo literalmente de rodillas, diciéndole aquí estamos contigo. El Papa Francisco envió como delegado oficial a monseñor Edgar Peña Parra para presidir los actos de clausura y a la vez oficiar la eucaristía y entregarnos la rosa de oro envidada por su santidad. Cuantas voluntades se unieron en un solo ideal para que fuera posible esta inolvidable celebración, monseñor José Dolores Grullón, presidente de la comisión , Sonia Villanueva, Kirssi de los Santos de Checo, José Armando Tavarez, el padre Kennedy Rodríguez, son parte de muchos héroes anónimos que pusieron todo su corazón.

Contigo siempre madre

Seguimos caminando con la Virgen María de la Altagracia, ahora en la construcción del templo en Hoyoncito, donde comenzó todo lo relativo a ella. Se procura hacer “El Camino de la Altagracia” algo parecido y guardando la diferencia con Camino de Santiago de Compostela en España. Comenzarán en el Cristo de los Milagros de Bayaguana, Hoyoncito, en La Cruz del Seibo hasta el Santuario y la Basílica de Higüey.

¡Salve María de la Altagracia!