Encontrar nuestra pasión

Parece extraño, pero a lo largo de los años y con las experiencias que vivimos reconocemos lo vulnerable que somos y que no vamos a vivir para siempre. Que solo tenemos el aquí y el ahora para realizar nuestros sueños, desarrollar las acciones personales y profesionales que nos conduzcan al camino de la realización individual, que no es más que el motor que se enciende a través de nuestra pasión.

Nuestro concepto de “pasión” es crucial para que trabajemos en encontrarla. No hay edad, tampoco el autoconocimiento es determinante para identificar el camino que queremos emprender. Debemos buscar los conceptos y caminos que nos induzcan a nuestro objetivo. Podemos iniciar preguntándonos: ¿Qué haría si solo me quedan cinco años de vida? Nunca estamos preparados para tomar acción ante esta interrogante, aun si esta fuera nuestra realidad, sin embargo, responder esta interrogante nos conlleva a darnos cuenta de las cosas que realmente son importantes para nosotros. Qué queremos, ¿cuándo y cómo lo queremos? Incógnitas a las que el ajetreo laboral o personal no nos permite dedicarle tiempo y esfuerzos. Lo ideal, luego de obtener las respuestas es: enfocarnos en ellas.

El valor de la pasión

Vivir una vida apasionada es un trabajo constante, de ideas claras y precisas que no se consigue de la noche a la mañana. Es una faena aguda y no es tan glamurosa como algunas personas lo hacen parecer en las redes sociales.

Sin embargo, esto no significa que no debamos ir tras ello. Lo ideal es poner manos a la obra, pues es un trabajo que nos llenará de satisfacción realizarlo. Al tomar el impulso necesario y trabajar específicamente en lo que más queremos, nos cambiará la vida. Son pasos gigantes que nos ayudarán a sentirnos más realizados, entusiasmados y felices. Entonces, empezamos a encontrar razones inquebrantables para levantarnos cada mañana agradecidos por la vida que estamos viviendo.

Haz pausas…

Sueña despierto. Deja que tu mente baile sin tiempo y sin medidas. No es una casualidad encontrarnos con textos como este, simplemente míralo con reflexión, y sin apresuramiento comienza a trabajar en resolver las cosas que hoy dan respuestas a las interrogantes antes expuestas, porque estas, no se resolverán solas, tampoco con el tiempo.

Hacer una lista de todas las cosas que nos apasionan nos conectará con la llamada de nuestra alma, permitiéndonos que allanemos el camino desde nuestra intuición hasta nuestra pasión. El cambio de vivir desde nuestra pasión es un acto de alegría que comienza con una sola persona y un solo paso. Nuestras decisiones determinan nuestro camino en la vida, piensa en el siguiente paso posible que puedes dar, y hazlo.

¡Con Dios!