LA HORA DEL TÉ
Fundación Fénix: La esperanza de volver a vivir
En 1994 Giralda Busto de Imbert descubrió la misión que Dios había elegido para ella, y la asumió con valentía. Junto a un grupo de amigos abrazó el compromiso de ayudar a las personas que estaban atrapadas en el círculo de alguna adicción.
Así nació la Fundación Fénix. Una iniciativa que marcó un antes y después en el conocimiento de la enfermedad y su tratamiento.
Invitada a compartir en el tradicional encuentro La Hora del Té, de Listín Diario, la fundadora de la entidad rememoró aquellos tiempos.
“Todos venimos al mundo a cumplir con un propósito. A veces, descubrirlo requiere de tiempo. Ha sido una tarea ardua lograr concienciar a la sociedad de que la adicción es una enfermedad. El adicto era estigmatizado, muchas veces por la por la falta de conocimiento de que se trata de un padecimiento biopsicosocial; y su propia familia se negaba a brindarles la ayuda requerida”, sostuvo Busto de Imbert.
A pesar de la apatía de algunas personas, doña Giralda no desmayó en su intención. “Incentivamos un plan de formación profesional, a la par de la evolución constante de los programas, y con el tiempo hemos alcanzado una alta tasa de recuperación de adictos. Hoy, 28 años después, miles de personas disfrutan de la oportunidad de volver a vivir”.
La Fundación Fénix desarrolla diversos programas para prevenir la adicción y canalizar un acompañamiento adecuado, con integridad, respeto, y sin exclusión.
Prevención y educación en pro de familias sanas
Por espacio de 24 años, la Fundación Fénix se mantuvo firme a su compromiso de ofrecer soluciones a través de tratamiento ambulatorio y residencial. En el 2018 renovó su estructura para fortalecer su labor de apadrinamiento.
“En la actualidad, seguimos con el mismo entusiasmo. Enfocados en la educación y la prevención a través de charlas dirigidas a los estudiantes, psicoeducación a especialistas de la salud, promoviendo el conocimiento de modelos para tratar la adicción, y acercándonos a las empresas para solicitar apoyo económico para quienes carecen de recursos, quieren recuperarse y necesitan internamiento por la complejidad de su caso”, explicó Kirsis de Domínguez, miembro de la Junta Directiva.
“Luego de un fructífero recorrido, apunta Domínguez, en el 2018 Fundación Fénix se apoya en la Clínica Clarium y otros centros para ayudar a pacientes a costear su tratamiento integral”.
Relevo generacional
En el 2021, la psicóloga clínica Dianne Bisonó asume la responsabilidad de dirigir la entidad con la intención de poner a su servicio sus conocimientos y experiencia.
“Hemos tratado de mostrar al adicto como un ser humano digno que padece de una enfermedad incurable y progresiva. Que a pesar de querer cambiar su historia por sí solo, no lo ha podido lograr. Por eso el motivo de nuestra existencia, como órgano de servicio, devolverle la esperanza al adicto que todavía sufre””, dijo la especialista.
Bisonó explicó que el alcoholismo es el trastorno más común, pero existen también adicciones conductuales, como a los videojuegos, las compras y el teléfono móvil. Llevando a la persona a vivir un estilo de vida disfuncional y desadaptativo en todas las áreas.
Dijo que un comportamiento se convierte en adicción cuando lleva a una persona a dedicarle mucho tiempo y dinero, afectando sus relaciones familiares, laborales, económicas y sociales.
"Sustancias o comportamientos, todas conducen a la adicción, y es uno de los objetivos de Fundación Fénix cambiar la estigmatización del enfermo a la humanización”, concluyó Bisonó.
Testimonio
Un día a la vez
Ángel Del Valle es el tesorero de la Junta Directiva de Fundación Fénix, tras largos años siendo adicto, se define como un alcohólico en recuperación.
“Reconocí que tenía un problema de conducta y busqué ayuda. Gracias al apoyo de los programas de Fundación Fénix pude transformar la tiniebla en Luz. Recuperé mi familia, mi vida. Ahora vivo un día a la vez. No tomar alcohol del día de hoy es mi meta de hoy, mañana será la meta de mañana. He aprendido a aceptar mi condición y soy un hombre feliz, testimonio de que se puede volver a vivir”.
De Interés
La adicción es una enfermedad biopsicosocial, ya que postula el factor biológico y psicológico, así como los factores sociales que desempeñan un papel significativo de la actividad humana en el contexto de la enfermedad, según explicó Dianne Bisonó, presidente Fundación Fénix, especialista en Psicología Clínica, Intervención Psicoterapia y Consejería en Adicciones
En el 2009, la Fundación Fénix implementó un modelo de tratamiento residencial en fase piloto para 32 pacientes. Esta iniciativa aumentó la oferta de servicios de salud, y logró hacer más eficiente la propuesta terapéutica de aquellos pacientes que carecían de una red de apoyo primario para su acompañamiento.