CRÓNICA LIGERA
¡Mañana es Navidad!
Desde niña aprendí amar esta temporada. Me crie como todo los infantes de mi época creyendo en el niño Jesús y en Los Reyes Magos. Soy un ser humano que decidió vivir en la autenticidad, entonces todos saben que no necesito fecha para celebrar, pero me encanta tener motivos y razones para agradecer a Dios y estas fechas son propicias para pasar balance.
Sin embargo, debo admitir que frente a las situaciones que hemos tenido que enfrentar, seguimos teniendo decenas de razones para mantenernos alegres, quizás de una forma distinta, pero felices. Hemos sobrevivido a una pandemia y aunque nos seguimos enfrentando a distintas situaciones, este es el momento oportuno del año para agradecer, valorar y ser consciente de los logros y aprendizajes que nos deja este 2021… ¡Fue un gran año!
Aceptación
Me quedo con grandes lecciones de este año. Una de las más importantes es la aceptación. Aprendí a mirarme con coherencia, lo que me condujo a una mejor valoración de mis dones, valores y pasiones. Me hablo en el tono ideal, de acuerdo a los diálogos internos que viajan entre mis pensamientos. Encontré sostén en mi apreciación y descubrí que la de los demás es buena, pero no tan importante como la mía.
Acepté lo suficiente que soy para determinadas cosas y lo débil que puedo ser para otras, pero lo más importante de este año, es que deje de criticarme, bloquearme y maltratarme, para convertirme en mi fan número uno, celebrándome, apoyándome y aplaudiéndome. ¡Vivo con el corazón alegre!
Conocimientos
Hice un “stop” y reevalúe los caminos elegidos, identifiqué mis bloqueos y obstáculos, y los convertí en retos. Me sacudí, aislé las excusas y me fijé metas de preparación que me condujeron al lugar donde quiero estar.
Estudié como una niña, busqué, escudriñé y encontré los conocimientos que satisfacían mis ambiciones… El resultado, es una mujer satisfecha, que ha identificado su propósito de vida, llena de experiencias y conocimientos que busca la forma ideal de compartirlos desde el amor, la alegría y el positivismo.
Aprendizaje
Cada quien vino al mundo con su luz propia y trajo consigo una magia especial… ¡Descubra sus encantos y aprenda a usarlos! La identificación de los mismos, le ayudará a conocerse, podrá entender su propio accionar y el proceder de los demás.
Yo reubique mi fe, entonces vivo eternamente agradecida, y le doy el uso adecuado a la autoridad que tengo a través de mis palabras, las uso para valorar, agradar, reconocer y felicitar. ¡Vivo en el deleite pleno de mí ser! Lo demás es obra y gracia de Dios.
¡Feliz Navidad!
¡Con Dios!