De Cerca
La valiente viuda del presidente de Haití
El pasado 7 de julio me estremeció la noticia de que el presidente de Haití, Jovenel Moïse, fue asesinado a tiros en su residencia mientras dormía, en un hecho confuso que aún no logra esclarecerse.
A Martine Möise, su esposa, al parecer los asesinos dejaron por muerta. A ella le dispararon en los brazos y piernas, fue herida gravemente en una mano y en el abdomen, de acuerdo con medios haitianos. Sus tres hijos, dos varones y una mujer, no sufrieron ningún daño físico.
Martine fue tratada en un hospital de Florida y gracias a Dios superó el ataque. Debió haber sido terrible aquel momento, sin embargo, ella no piensa dejar que la delincuencia empañe el sueño de su esposo.
No teme hablar
Días después, en la cuenta oficial de Twitter de Martine Moïse, publicaron un audio de ella en el que relaciona el motivo del asesinato con el deseo del presidente de celebrar un referéndum para aprobar una nueva Constitución.
Sin una pizca de duda, en la grabación, la Primera Dama insistió en que enviaron muchos mercenarios para asesinar a su esposo porque, a su juicio, no querían una transición en el país. Me parece una mujer valiente, muy valiente, porque a pesar de lo que puede significar su declaración, ella no se ha dejado amedrentar por los hechos.
De vuelta a Haití
Ahora no solo está viviendo el duelo por la muerte de su esposo, también tendrá que adaptarse a un período difícil de juicios y testimonios. Perder a un ser querido nunca será fácil y cuando es en un acontecimiento tan traumático de seguro hay muchas preguntas sin respuestas.
Me sorprendió ver que apenas recuperada, Martine Möise volvió a Haití para asistir a los funerales de su esposo.
Con una mirada triste y cabizbaja, herida y con un chaleco antibalas, llegó a Puerto Príncipe para vivir el episodio más triste que puede experimentar una esposa.
Fortaleza para ella
Martine conoció a Jovenel Moïse en la Universidad y se casaron en 1996. Leí que es una mujer entregada a sus hijos y siempre apoyó a su marido. Desde antes de ser Primera Dama de la República de Haití, ha trabajado en favor de los niños, de manera que su compromiso con Haití ha estado siempre definido.
Con un país devastado por la delincuencia y los altos precios, es lamentable que los ciudadanos se han mostrado un tanto indiferentes ante el asesinato de Jovenel. Pero no olvidemos que esa familia ha perdido a un ser amado que, independientemente de la política y su proceder, era un ser humano, un padre, un esposo.
Dios conceda fortaleza para Martine y sus hijos, y que se haga justicia para su tranquilidad. Ella ya ha demostrado su valentía, el Señor la acompañe.
¡Hasta el lunes!