Luis Abinader. Día de la Libertad

No tuvieron que pintar de azul la escenografía, el increíble Mar Caribe dibujó el fondo del escenario del Centro de los Héroes, donde las suaves olas abrazaron los sentimientos libertarios que se respiró en el simbólico lugar. Marcando justamente las 6:00 de la tarde se honró la memoria de todos los dominicanos que sembraron de honor con sus vidas la vuelta a la libertad después de 31 años de represión, oprobio, muerte y dolor por la odiosa tiranía.

No había que estar en ese lugar para sentir una gama de emociones que oprimían el corazón. El presidente Luis Abinader declaró el pasado 30 de mayo como el “Día de la Libertad”, y se organizó un impresionante memorial donde funcionarios, descendientes de los mártires se dieron cita en esa cálida tarde del pasado sábado en homenaje a la resistencia nacional y a las víctimas de asesinatos, desapariciones, torturas, abusos y desmanes cometidos durante la dictadura Trujillo Molina.

Luis Abinader

El presidente de la República, Luis Abinader Corona, vestido del clásico negro, camisa blanca y unas pequeñas gafas que hacían juego con la corbata encabezo el emotivo acto previo a convocar a todo el país a un silencio nacional. Inició su discurso pidiendo un minuto de silencio por la memoria de los hombres y mujeres de la resistencia nacional, héroes y heroínas anónimos, “Es a quienes hoy quiero recordar y rendir homenaje, para que nunca más nuestra Patria vuelva a tener que llorar a sus hijos”. Destacó además “hay que desterrar para siempre los males que, heredados de la dictadura, como la corrupción, la violencia o la impunidad, sigue sufriendo hoy nuestro país”. Con mucha fuerza el primer mandatario concluyó, “Solo un pueblo que sabe de dónde viene y hacia dónde se dirige, puede caminar seguro hacia la paz, la igualdad, la solidaridad, la justicia social y el respeto a los derechos ciudadanos”. Muy emotivas sus palabras las cuales arrancaron aplausos.

Un océano de lágrimas

La libertad debe ser el primer derecho del ser humano cimentado en los criterios valores, en la voluntad, la decisión y el respeto al bien común, todo eso me pasó por la mente viendo las caras de nuestra primera dama Raquel Arbaje de Abinader y Milagros Germán, quienes dejaban fluir sus sentimientos. Una que vivió y tiene mucho que contar de esa época, es Milagros Ortiz Bosch, sus ojos se convirtieron en un océano por las lágrimas derramadas. Realmente me puso a llorar y a sentir el precio que tuvieron que pagar tantos dominicanos y dominicanas. Ellos hicieron una hermosa y gran alfombra para que caminemos sobre una democracia imperfecta pero democracia al fin la que estamos viviendo y la que tenemos que cuidar hasta la muerte si de nuevo se intentará mancillar la apreciada y venerada libertad.

Una historia que contar

Cabe resaltar que quedó inaugurada la exposición “1961: El año de la libertad”, definida como un recorrido por los 31 años de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo. La muestra abarca los hechos posteriores al tiranicidio y días claves en los que el pueblo expresó en las calles sus anhelos de libertad y justicia. Para quienes se animen a transitar por nuestra historia la misma está expuesta en la Plaza de las Américas, área mejor conocida como “La bolita del mundo”, en el Centro de los Héroes, y estará abierta al público durante seis meses. Buena noticia también estará en versión digital disponible en internet para los que prefieren verla desde sus casas. Aplausos, aplausos fue un gran evento para reafirmar nuestro amor a la República Dominicano.

¡Les dejo mi ternura!