El protocolo de la corona
El protocolo de la situación de Harry y Meghan
En el protocolo británico, existe lo que se llama las “cartas patente” de 1917 del Rey George V, en estas cartas se establece, entre otras cosas, la precedencia a seguir en cuanto a los títulos nobiliarios de ciertos miembros de la familia real británica. De acuerdo a la carta, publicada en 1917, los bisnietos del monarca ya no serían príncipes ni princesas, con excepción del hijo mayor del príncipe de Gales. Como el príncipe William es el hijo mayor del príncipe Carlos (quien es el “príncipe de Gales”),
Mucho se ha conversado sobre la entrevista de Oprah con Meghan Markle y el Príncipe Harry. Muchas personas no entienden muy bien la situación entre los Duques de Sussex y el Palacio de Buckingham y, debido a que no todo el mundo conoce a profundidad el protocolo británico, ha habido mucha desinformación y especulación no sólo de parte del público, sino también de comentaristas aficionados a la realeza en las redes sociales. A continuación lo explicaré de manera simple y breve. En la entrevista se trataron otros temas de la familia, pero me voy a limitar a explicar sólo lo concerniente al protocolo, de acuerdo a la línea de sucesión, que es el tema que le compete a mi profesión.
Cartas Patente
En el protocolo británico, existe lo que se llama las “cartas patente” de 1917 del Rey George V, en estas cartas se establece, entre otras cosas, la precedencia a seguir en cuanto a los títulos nobiliarios de ciertos miembros de la familia real británica. De acuerdo a la carta, publicada en 1917, los bisnietos del monarca ya no serían príncipes ni princesas, con excepción del hijo mayor del príncipe de Gales. Como el príncipe William es el hijo mayor del príncipe Carlos (quien es el “príncipe de Gales”), a su hijo mayor le correspondería, por nacimiento, el título de príncipe. Por eso, cuando el primer hijo de William nació, pasó automáticamente a recibir el título de príncipe con el tratamiento de “Su Alteza Real”. Por otro lado, es importante saber que los títulos de príncipe y princesa sólo se transmiten por la línea masculina, por eso, los hijos de la princesa Anne, hija de la reina Isabel II, no tienen títulos de príncipe o princesa, aunque son bisnietos de la reina.
No obstante, aunque existen las “cartas patente”, la reina actual tiene el poder de cambiar las reglas o hacer excepciones, si desea. Por eso, en el 2012 la reina Isabel II decidió cambiar la convención para que el segundo y tercer hijo del príncipe William también recibieran el título de príncipe y princesa. Es decir, de acuerdo a las cartas patente de 1917, el título de “príncipe” sólo le corresponde al hijo mayor del príncipe William, pero la reina hizo la excepción para que, tanto Charlotte como Louis (el segundo y tercer hijo de William y Catherine) también recibieran los títulos de príncipe y princesa, y sean tratados como “Su Alteza Real”
¿Qué título le corresponde a Archie, el hijo del príncipe Harry y Meghan?
Por protocolo, al hijo del príncipe Harry le corresponde el título de conde de Dumbarton (que es uno de los títulos que tiene Harry) y cuando el abuelo del niño (es decir, el príncipe Carlos) ascienda al trono, automáticamente Archie pasaría a ser príncipe. Una fórmula fácil de entender esto es que los títulos se van “heredando” conforme va ocurriendo la sucesión. Es decir, cuando la reina Isabel deje de reinar, su hijo (el príncipe Carlos) asume la posición de rey, William tomaría el lugar del príncipe de Gales y, a su vez, los demás miembros en la línea de sucesión también van heredando títulos y subiendo de posición.
Entonces, ¿cuál es el problema o la situación?
Cuando nació Archie, el palacio anunció que Harry y Meghan habían decidido que el bebé no llevara ningún título. Sin embargo, en la entrevista con Oprah, Meghan reveló que la decisión no fue de ellos, sino que fue decisión del palacio. En adición, también manifestó que, durante su embarazo, le informaron que, cuando el príncipe Carlos ascienda al trono, Archie tampoco se convertiría en príncipe puesto que la intención de Carlos, cuando sea rey, es reducir al mínimo los títulos nobiliarios. También Meghan expresó que hubo conversaciones de preocupación, dentro de la familia real, concernientes a qué color de piel tendría su hijo. Todo esto, explicó Meghan, demuestra un aparente trato discriminatorio hacia Archie.
Para entender mejor el contexto de la situación, Meghan siempre ha sido acusada y retratada por la prensa británica como una persona que “rompe el protocolo” lo cual, regularmente, es recibido como una ofensa por el pueblo británico que siempre ha sido celoso de sus tradiciones. Sin embargo, de acuerdo a Meghan, el rompimiento del protocolo referente al título del bebé no fue decisión de ella, sino de ellos mismos en el palacio. Por lo tanto, a ella le hubiese gustado que el palacio hubiera anunciado y aclarado, en su momento, que la decisión de que el niño no tenga título, no fue decisión de ella ni de Harry, sino de la misma institución.
Por otro lado, no sustentar título supone que el niño no reciba seguridad por parte del palacio. Este factor era de gran preocupación para los Duques de Sussex ya que, el hecho de que el niño se mantenga y crezca en el Reino Unido, sin protección, es un gran riesgo de seguridad por las constantes amenazas de muerte que ellos reciben.
De acuerdo a Harry y Meghan, para ellos lo importante no es que Archie sea “príncipe” o lleve un título nobiliario, sino la razón del por qué no haberle ofrecido los títulos que le corresponden (conde de Dumbarton y, en un futuro, príncipe), haber expresado preocupación por el color de la piel del niño en varias ocasiones, y no querer proveerle de protección y seguridad.
La influencia de los tabloides
La tabloides británicos han sido especialmente agresivos con la duquesa de Sussex publicando, constantemente, historias, rumores y falsedades que la proyectan como una villana. Esto ha generado un odio desproporcionado en el público que la hizo susceptible a múltiples riesgos y a recibir constantes amenzas de muerte. Después de varias conversaciones con el palacio, Harry y Meghan propusieron tener un rango menor dentro de la monarquía para tener una exposición menor y reducir el riesgo en el tema de seguridad y proteger, además, su salud mental. Harry, especialmente expresó que no le gustaría que el destino de Diana se repita con Meghan. Según expresaron los Duques de Sussex, ellos querían seguir trabajando para la reina pero, desde una posición menor y teniendo sede en otro país que pertenezca a la Commonwealth (una asociación política que encabeza la reina y que consta de países relacionados al Reino Unido). No obstante, el palacio no aceptó la propuesta por lo que, según explicó Harry, no tuvieron más remedio que retirarse por completo. El palacio también eliminó la posibilidad de que ellos continuaran colaborando con las organizaciones que representaban. De acuerdo a Harry y Meghan, ellos nunca quisieron desligarse del trabajo con dichas instituciones.
En la búsqueda de opciones para generar ingresos suficientes para cubrir sus gastos y, principalmente, pagar por su propia protección y seguridad, Harry explicó que surgieron los proyectos de Netflix y Spotify en Estados Unidos, los cuales proporcionarán un buen colchón para cubrir, especialmente, los del servicio de protección (que son bastantes costosos). Además, crearon su propia organización llamada “Archewell” que consta de una fundación de ayuda humanitaria y una productora de audio y video que se encargará de producir contenido educativo e inspirador.