CRÓNICA LIGERA
¡Don Miguel, premio Nacional de Periodismo!
Al saber la noticia de que don Miguel Franjul, fue seleccionado como premio Nacional de Periodismo 2020, sentí un regocijo en lo más profundo de mí ser. Este reconocimiento a su destacada trayectoria profesional en los medios de comunicación nacional e internacional me llenan de orgullo y multiplica mi admiración y agradecimiento a un hombre que me abrió las puertas a una nueva área profesional, aun cuando el verde de las hojas cubría mi cuerpo de mujer de campo, cual mariposa abría sus alas para dar riendas sueltas a la realización de un importante sueño.
Mi experiencia
Desde los primeros años que comencé a ejercer mi carrera de periodista, el Listín Diario fue y sigue siendo mi casa. Desde hace diecinueve años escribo mi columna semanal “Crónica Ligera”, antes había escrito “Actividades y Eventos”, también fui parte del staff de “Las Sociales”, ambos espacios y mi paso presencial por la redacción del decano de la prensa dominicana, nacieron bajo la dirección de Don Miguel Franjul, él ha sido una pieza clave en mi desarrollo como ser humano y como profesional.
Hemos compartido criterios, hemos tenido diferencias, hemos realizado estrategias, pero sobretodo hemos desarrollado una gran amistad, adornada con una buena dosis de respeto, admiración y obediencia. Desde que entré a la amplia lista de colegas que nos forjamos bajo sus alas he experimentados cambios significativos, recibiendo un buen apoyo al desarrollo de mis ideas y en mis ambiciones competitivas, lo que me lleva a afirmar que mi crecimiento encontró madurez en la guía y protección de maestros de la talla de Franjul. Abierto, participativo, dispuesto y colaborador, que con paciencia y una amplia sonrisa siempre ha sabido ser guía y mentor.
El premio
Todos los periodistas recibimos el premio, no importa quién lo gane. Es un reconocimiento que nos pertenece, nos engrandece, y que honra nuestra clase. El valor de los hombres se hace grande, cuando comparten sus talentos, cuando son capaces de sembrar en otros sus sapiencias, apreciación y respeto hacia lo que hacen y hacia los demás, logrando así, que estos permanezcan en el tiempo. Don Miguel o el Señor Franjul, como le llamamos dentro y fuera de la redacción, ha marcado con sus huellas y plasmado en el corazón de una generación de periodistas, a la que él ayudó a definir su estilo, a la que le marcó los pasos y a la que simplemente le dio la oportunidad o le tendió las manos con actos llenos de buen proceder, valor y responsabilidad… Un premio como este le suma a su pluma, pero lo más importante es que resalta su calidad humana, reconfirmando que nació para informar, orientar y ser vigilante de nuestra democracia.
¡Honor a quien honor merece!
¡Muchas felicidades!Con el favor de Dios nos leemos la próxima semana.