Pescador de sueños

No puedo dejar pasar esta fecha, que recién se celebra el Día Nacional de la Juventud para contarle la vida de este talentoso joven.

Soy una mujer suertuda o bendecida por todas las bonanzas que hoy visualizo en mi vida, superando mis expectativas, aun sean negativas ante el ojo del hombre. Pero haciendo un balance justo y sin cuestionar si existe o no esta palabra mágica, lo cierto es que para que se pose en nosotros debemos estar preparado y en el lugar indicado el día que aparezca.

Para reconocer si tenemos suerte o no, debemos despojarnos de conductas tóxicas que nos nublan la conciencia hasta creernos que lo merecemos todo y que en el trayecto hacia el sueño planificado nunca necesitamos de nadie. De esa misma forma, debemos darnos una cuota de merecimiento y reconocer que todo es posible por un orden divino, y pese a los pronósticos de quienes siempre apuestan a nuestro fracaso por las pocas oportunidades que el sistema ofrece, tomamos la decisión de seguir luchando por un sueño como un pescador cuando sale a mar abierto en busca de los peces que nunca crió.

Como yo, hay cientos de personas, pero hay uno en particular que siempre recuerdo, y por concidencia de la vida, volví a verlo. Se trata del joven Julio César Reyes. Ya lo conocía de niño, cuando por primera vez fue ganador de un concurso de pintura en la “Semana de la Geografía”, que organizaba el Plan LEAa de Listín Diario, quedando como ganador del primer lugar de la categoría C. Y por ende una beca. Hoy me cuenta que este fue el impulso de su carrera. Fue así que conoció a la maestra Daisy Pimentel en el taller de arte que lleva su nombre, a quien le debe la mayor parte de su desarrollo y conocimientos en la pintura.

Como todo niño con dones innatos quería seguir adelante con este plan de vida que siempre reconoció. Aunque no recuerda la edad exactamente de sus primeros trazos pero sí que era el más buscado para que ayudar con los dibujos de la escuela. Esto le encantaba porque lo veía como una práctica para desarrollar su talento.

Nunca olvida su frustración al no poder entrar a estudiar en la Escuela Nacional de Bellas Artes, debido a que pertenecía a una familia matriarcal y las posibilidades financieras no le permitían aspirar muy lejos… Producto de su buen comportamiento una vecina lo ayuda a que ingrese a estudiar dibujo y pintura en la Asociación de Esposa de Oficiales del Ejército Nacional en San isidro. Fue allí donde empezó a dar mis primeros pasos.

En el 2009, motivado por el dibujo y la pintura, empieza a estudiar Publicidad Mención Diseño Gráfico en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), conjuntamente a la Fuerza Aérea Dominicana, por lo cual tenía que trabajar y estudiar. Esto no impide que se gradué con honores seis años después.

A pesar de que había participado en más de veinte exposiciones colectivas, sentía la necesidad de dar a conocer sus obras, tanto a nivel nacional como internacional, y se embarca en su primera exposición individual titulada “pescadores de sueños” en el Instituto Cultural Dominico Americano, 2016. En ese mismo año la Mescyt le otorga una beca para estudiar Historia del Arte en la Universidad de Valencia, España, beca que aprovecha no solo para ampliar sus conocimientos sobre el arte, sino para dar a conocer sus obras y con ellas hacer que el dominicano ausente reviva el amor por la patria que lo vio nacer y para que otros países conozcan más de República Dominicana.

Con mucho orgullo dice que sus obras están enfocadas a concienciar y educar a los dominicanos en el uso racional, cuidado y conservación de nuestros recursos naturales, culturales e históricos. De igual forma, quiere dar a conocer lo que somos, lo que hacemos, lo que tenemos y lo que nos identifica.

Al final de este encuentro, Julio César me dice que las oportunidades para los jóvenes están escasas, pero no todo está perdido. En el caso de los artistas están viviendo un tiempo de autogestión, muchas veces, costeadas por sí mismos. Ahora sí que nos pega la frase “por amor al arte”, dice con una carcajada.

Así fue como encontró apoyo para promover y difundir la cultura dominicana en una exposición individual en Valencia, España; de mi parte no puedo dejar pasar esta fecha, que recién se celebró, Día Nacional de la Juventud, para contarle la vida de este talentoso joven.