Francia pide a sus ciudadanos no viajar a Níger
En la última actualización sobre la situación en ese país africano, el Ministerio de Asuntos Exteriores francés señaló que "todo desplazamiento a Níger está vivamente desaconsejado"
Partidarios de la junta militar que tomó el poder en Níger despliegan una bandera rusa al inicio de una protesta convocada para luchar por la libertad de país y contra una intervención extranjera, en Niamey, Níger, el 3 de agosto de 2023
Francia desaconseja a sus ciudadanos viajar a Níger y a los que se encuentran en el país les urgió a limitar sus desplazamientos y actuar con prudencia ante la situación que vive ese país.
En la última actualización sobre la situación en ese país africano, el Ministerio de Asuntos Exteriores francés señaló que "todo desplazamiento a Níger está vivamente desaconsejado".
Y, para los que continúan en Níger tras la operación de evacuación de la pasada semana, la nota oficial les insistió en mantener "la mayor vigilancia".
"Es esencial que limiten sus desplazamientos, que se mantengan alejados de cualquier aglomeración y que se informen con regularidad de la situación", concluyó.
La tensión en la zona es alta después de que ayer domingo concluyó el ultimátum que la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) dio a los militares golpistas de Níger en el poder para restaurar el orden constitucional, bajo la amenaza de una intervención militar.
Como respuesta, la junta militar golpista en Níger anunció que vuelve a cerrar el espacio aéreo del país africano desde hoy.
Francia llevó a cabo la semana pasada una operación de evacuación con aviones militares de los ciudadanos galos que deseaban salir de Níger, con cuatro vuelos que llevaron a París a 1.079 personas: 577 franceses y el resto de otro medio centenar de nacionalidades, incluyendo españoles y latinoamericanos.
La operación de evacuación se puso en marcha a raíz de los incidentes violentos que se dieron en la Embajada francesa en Níger el pasado 30 de agosto, durante una manifestación en apoyo a los golpistas, que habían decretado el cierre de las fronteras tras su operación para derrocar al presidente Mohamed Bazoum, el 26 de julio.