Panamá, Costa Rica y Dominicana piden "medidas concretas" a EEUU para frenar migración irregular
Los presidentes de Panamá, Laurentino Cortizo; Costa Rica, Carlos Alvarado; y República Dominicana, Luis Abinader, pidieron este miércoles a Estados Unidos "medidas concretas" para frenar la migración irregular de haitianos en América Latina.
"Le estamos haciendo un llamado a Estados Unidos" para buscar "medidas concretas" que frenen la migración de haitianos por la región porque es un "problema insostenible", sostuvo Cortizo tras reunirse con Alvarado y Abinader en el Palacio de Las Garzas, sede del gobierno panameño.
"Este es un problema regional y las soluciones tienen que ser regionales, nosotros esperamos de Estados Unidos una participación mucho más efectiva", agregó.
Los mandatarios insistieron en la necesidad de involucrar a Estados Unidos y a Naciones Unidas en la búsqueda de inversiones, sobre todo en infraestructura pública, que generen empleo masivo y un mayor desarrollo en Haití, azotado por la pobreza, la violencia y crisis institucionales.
"Consideramos que la comunidad internacional debe llevar adelante una serie de acciones coordinadas en Haití y proponemos una hoja de ruta", señaló Alvarado.
"Haití no se puede dejar solo, pero tampoco se nos puede dejar a los vecinos, (es un problema) que está afectando ya a toda la región", agregó Abinader.
La semana pasada, la subsecretaria estadounidense de Seguridad Civil, Democracia y Derechos Humanos, Uzra Zeya, visitó Haití y Panamá, donde abogó por aumentar la seguridad y el control del flujo de migrantes por Darién.
La frontera selvática entre Panamá y Colombia, de 266 km, se ha convertido en un corredor para la migración irregular, principalmente de haitianos.
En 2021, según cifras oficiales panameñas, más de 107.000 personas procedentes de Sudamérica han cruzado la selva del Darién para atravesar América Central en su ruta hacia Estados Unidos. Esa cifra es casi el equivalente al acumulado de los últimos seis años.
Las autoridades panameñas calculan en 150.000 el total anual de migrantes que realizarán la peligrosa ruta del Darién, plagada de animales salvajes, ríos caudalosos y grupos criminales.
República Dominicana, que comparte isla con Haití, también es receptora directa de la migración irregular de haitianos.