Coronavirus

Japón prolonga estado de emergencia por covid e India vuelve a registrar récord de casos

Mientras varios países occidentales siguen avanzando en la reapertura escalonada, confiando en el progreso de las campañas de vacunación

Reuters

El gobierno japonés prolongó este viernes el estado de emergencia en Tokio y en varias regiones del país, a menos de tres meses para los Juegos Olímpicos, debido a un aumento de los contagios de covid-19, que en India volvieron a superar un récord.

Mientras varios países occidentales siguen avanzando en la reapertura escalonada, confiando en el progreso de las campañas de vacunación, todavía son muchas las naciones que se enfrentan a los estragos del virus, que ha se ha cobrado más de 3,2 millones de vidas en el mundo y ha infectado a unas 155 millones de personas.

Japón se enfrenta a una nueva ola de contagios, con unos 5.300 nuevos casos diarios en promedio semanal. Aunque la magnitud de la pandemia sigue siendo limitada en comparación con otras regiones del mundo, la crisis sanitaria está colapsando el sistema hospitalario y la campaña de vacunación avanza muy lentamente.

Las restricciones sanitarias, menos estrictas que los confinamientos aplicados en otros países, estaban en vigor desde finales de abril e iban a expirar el 11 de mayo, pero las autoridades decidieron prolongarlas hasta el 31 de mayo.

"El número de nuevos casos está en un nivel alto en las grandes ciudades y los hospitales están bajo presión en Osaka y Hyogo", dijo el primer ministro Yoshihide Suga.

El nuevo brote de infecciones representa una amenaza para los Juegos Olímpicos de Tokio (del 23 de julio al 8 de agosto), aplazados un año en 2020 debido a la pandemia.

730 toneladas de oxígeno

En India, actual epicentro de la pandemia, el virus no da tregua y se volvió a registrar otro récord de contagios diarios, con 414.000 nuevos casos en las últimas 24 horas. Se contabilizaron además casi 4.000 nuevos decesos, según datos oficiales, que muchos expertos consideran muy inferiores a la realidad.

El estado de Goa, en el sur, conocido por sus turísticas playas, registró una tasa de positivos a la enfermedad de 41%, según el periódico Times of India.

Nueva Delhi, la capital, es la segunda zona más golpeada por el virus.

Pero parece que en la megalópolis de 20 millones de habitantes la situación empieza a mejorar ligeramente, dijo el jueves el jefe del Ejecutivo local, Arvind Kejriwal.

"Ayer, por primera vez, recibimos 730 toneladas de oxígeno", declaró a la prensa. "Pero este suministro se necesita a diario".

La virulencia de la pandemia ha puesto en jaque el frágil sistema sanitario de este país de 1.300 millones de habitantes. Los hospitales carecen de camas suficientes y oxígeno para tratar a los numerosos enfermos, y muchos mueren a las puertas de los centros.

Su catastrófica situación ya se ha desbordado a las naciones vecinas, Bangladés, Nepal y Sri Lanka, que el jueves decidió cerrar sus fronteras con India.

En Nepal, el virus amenaza la temporada de ascensión al Everest, después de que tuvieran que ser evacuados más de 30 alpinistas del campamento base (a 5.364 metros de altura) por presentar síntomas preocupantes.

"Tercera ola doblegada"

En Europa, la situación parece mejorar día a día, mientras las campañas de vacunación progresan y se van suavizando las restricciones anticovid.

En Alemania, tras un ligero retroceso del número de casos, "la tercera oleada parece doblegada", afirmó el viernes el ministro de Salud, Jens Spahn.

"El número de infecciones baja de nuevo pero sigue siendo elevado", advirtió no obstante.

Y en Dinamarca, se está extendiendo el uso de un pasaporte sanitario para poder acceder a cines, gimnasios o salas de espectáculo.

En el ámbito de las vacunas, el centro de atención está en una posible suspensión de las patentes de los inmunizantes, una propuesta presentada por India y Sudáfrica y que ha recibido el apoyo de Estados Unidos.

Esta iniciativa, que aceleraría la producción mundial de las vacunas, fue vista de forma favorable por Francia y Rusia, pero chocó con la oposición de Alemania. Su aprobación requiere del acuerdo de los miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC).