Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

¿Puede la vacuna del COVID-19 afectar a la menstruación?

Por el momento, los reportes de sangrado irregular han sido anecdóticos.

Vacuna contra el COVId-19, foto de archivo. / Listín

Vacuna contra el COVId-19, foto de archivo. / Listín

Puede la vacuna del COVID-19 afectar a la menstruación?

Por el momento no se sabe, pero los investigadores están empezando a estudiar el tema.

Las vacunas están diseñadas para activar el sistema inmunológico, y algunos expertos se han preguntado su eso podría alterar temporalmente los ciclos menstruales.

Por el momento, los reportes de sangrado irregular han sido anecdóticos. Y es difícil establecer una conexión con las vacunas, ya que los cambios pueden ser el resultado de otros factores como el estrés, la dieta y los hábitos de ejercicio. Tampoco hay datos suficientes que rastreen los cambios en los ciclos menstruales tras otras vacunas.

Si los científicos llegan a encontrar una conexión entre el fármaco contra el coronavirus y los cambios a corto plazo en el sangrado, los expertos señalan que no sería un motivo para no inmunizarse. “Los beneficios de recibir la inyección superan con creces a un sangrado abundante, si es que está relacionado”, dijo la doctora Mary Jane Minkin, ginecóloga y profesora en la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale.

Los investigadores lanzaron recientemente una encuesta para empezar a recopilar datos. Los hallazgos no determinarán si hay una relación entre la vacuna y los cambios menstruales, pero podría ayudar a sentar las bases para próximas pesquisas, apuntó Katharine Lee, una de las investigadoras, que trabaja en la Universidad Washington en St. Louis.

Jen Gunter, obstetra y ginecóloga en la zona de la bahía de San Francisco, señaló que la conexión es posible ya que el revestimiento del útero, el endometrio, que se desprende durante la menstruación, contiene células inmunes que ayudan a proteger el útero.

No hay evidencia de que las vacunas, incluyendo la del coronavirus, afecten a la fertilidad, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos y el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos.