Uruguay busca revalorizar sus fronteras con Argentina y Brasil

Así lo sostuvo el director de Asuntos de Frontera, Limítrofes y Marítimo de Cancillería, Federico Perazza.

Lacalle Pou, presidente de Uruguay. / EFE

Lacalle Pou, presidente de Uruguay. / EFE

Uruguay tiene la mira puesta en revalorizar sus fronteras, tanto con Argentina como con Brasil, a través de un Plan Nacional que le permita juntar a todos los organismos e instituciones que inciden en la vida diaria de estas zonas para coordinar una posición "genuina y fructífera".

Así lo sostuvo el director de Asuntos de Frontera, Limítrofes y Marítimo de Cancillería, Federico Perazza, en declaraciones hechas al propio Ministerio de Relaciones Exteriores uruguayo en las que dijo que es necesario darle respuesta a la zona fronteriza ya que, debido a la emergencia sanitaria, vive una compleja situación con problemas económicos y de informalidad.

"Quizás uno de los temas que mayor análisis e interacción requiera es el funcionamiento de los pasos de frontera, no necesariamente todos los organismos que tienen que estar en los pasos de frontera están, hay problemas de tecnología, infraestructura, cruzamiento de datos", subrayó.

Asimismo, el director dijo que es necesario impulsar "la integración física hacia la frontera" y buscar mecanismos para financiar obras de infraestructura que funcionen a la misma velocidad tanto del lado limítrofe con Argentina como con el de Brasil.

Debido a la emergencia sanitaria de la covid-19, Uruguay mantiene sus fronteras cerradas, con ciertas excepciones de ingreso. Sin embargo, en la zona de frontera seca con Brasil hay muchas ciudades que llevan adelante una vida binacional, en las que sus ciudadanos viven de un lado y trabajan del otro y el movimiento entre naciones no tiene ninguna restricción.

Así es el caso de la ciudad uruguaya Rivera (norte) y la brasileña Santana do Livramento, zona donde el gobierno ha tenido los mayores problemas para controlar el avance de la pandemia, pese a que han existido intentos de trabajar de manera conjunta entre ambos países para acordar estrategias en común.

"De las mayores debilidades que ha tenido nuestra política de integración fronteriza ha sido la ausencia de un mecanismo de monitoreo, de seguimiento de acciones que acordamos en la frontera", reflexionó Perazza.

La idea con este Plan Nacional de Fronteras es que todos los organismos e instituciones puedan plasmar sus inquietudes, presentar acciones concretas y así, en un futuro, avanzar hacia un proyecto de ley.

"Lo que queremos instalar primero es que haya una discusión sincera entre los organismos que llevamos fronteras, que siente las bases de una futura ley", concluyó.