Separatistas amplían su mayoría en el Parlamento de Cataluña
El resultado confirma que el sentimiento independentista no ha mermado.
El Partido de los Socialistas obtuvo el domingo un apretado triunfo en las elecciones regionales de Cataluña, pero el bloque de partidos que respaldan que ésta se independice de España amplió su control del parlamento regional.
Con 99% de los votos computados, los tres principales partidos enfocados en crear un Estado catalán independiente incrementaron a 74 sus escaños en el parlamento regional. En 2017, esos mismos partidos ganaron 70 bancas allí, de un total de 135, y quedaron con una mayoría de sólo dos.
El Partido de los Socialistas de Cataluña, que está a favor del federalismo y es encabezado por el exministro de Salud Salvador Illa, se disponía a obtener 33 bancas con más de 625.000 votos. El proindependentista Izquierda Republicana de Cataluña también se enfilaba a ganar 33 escaños, pero con 580.000 sufragios.
A pesar del marcado aumento en el respaldo al Partido de los Socialistas de Cataluña —que está asociado al Partido Socialista Obrero Español al que pertenece el jefe de gobierno Pedro Sánchez, quien sostuvo pláticas con los separatistas en un intento por aliviar las tensiones con las autoridades catalanas_, Illa tendrá dificultades para reunir el respaldo necesario para un gobierno de esta región del este de España, fronteriza con Francia. Requeriría del apoyo de varios partidos, incluyendo algunos separatistas.
El resultado confirma que el sentimiento independentista no ha mermado a pesar de las penurias colectivas relacionadas con la pandemia del COVID-19 y un frustrado intento de secesión en octubre de 2017 por el que varios de sus integrantes fueron a dar a la cárcel. Cuatro años después, la acaudalada región sigue dividida en torno a su posible separación del resto de España.
Sin embargo, se desconoce de momento si los partidos secesionistas podrán resolver las disputas internas que han asediado a su bloque desde que el sueño de obtener fácilmente su independencia de España demostró ser difícil de alcanzar.
Los resultados cambiaron el equilibrio de poder dentro del bloque separatista por primera vez hacia Izquierda Republicana de Cataluña, cuyos 33 escaños superaron al centroderechista Juntos por Cataluña, el cual se disponía a obtener 32.
Izquierda Republicana de Cataluña, encabezado por el encarcelado Oriol Junqueras, puede disputar ahora el liderazgo del bloque con Juntos por Cataluña, el partido del exlíder catalán Carles Puigdemont, quien huyó a Bélgica luego del fallido intento de separación en octubre de 2017.
Juntos Por Cataluña mantiene una postura más radical con respecto a la separación de España a corto plazo, mientras que Izquierda Republicana de Cataluña ha suavizado su posición al respecto en el último año y fijó como máxima prioridad — por el momento — obtener la amnistía de las autoridades centrales para Junqueras y otros líderes encarcelados.
Adrià Hoguet, de 29 años, cambió su voto de Juntos por Cataluña a Izquierda Republicana de Cataluña, señalando que el partido sabe que no será ni fácil ni posible obtener la independencia siguiendo los métodos anteriores.
Con estos resultados, el parlamento se tornaría mucho más fragmentado y radical.
El partido derechista Vox ingresó a la legislatura catalana por primera vez con 11 bancas, confirmando su avance en toda España en los últimos años. Su éxito vino a expensas del conservador Partido Popular, que se quedó con apenas tres escaños luego de una campaña en la que atenuó la que solía ser una postura estricta contra los independentistas catalanes.
En el otro lado del espectro político, el izquierdista y secesionista CUP aumentó su participación a nueve bancas respecto a las cuatro que poseía en 2017.
Así, una vez más las fuerzas secesionistas necesitarán del impredecible CUP para conformar un gobierno mayoritario.