Rusia amplía lista negra contra la UE en medio de tensiones por caso Navalni

Rusia anunció hoy que ampliará la lista negra de políticos europeos y responsables de la Unión Europea (UE) que no pueden entrar en este país debido a los pasos "inamistosos" dados por Bruselas.

"En respuesta a las acciones de la Unión Europea, la parte rusa tomó la decisión de ampliar la lista de representantes de los países miembros y de las instituciones de la UE que tendrán prohibida la entrada en territorio de la Federación Rusa", dijo María Zajárova, portavoz de Exteriores, a la prensa local.

Zajárova precisó que la lista negra es "paritaria", es decir, incluye ahora el mismo número de personas que la adoptada en su momento por los Veintisiete tras la anexión de Crimea y la injerencia rusa en el Donbás.

"Últimamente la UE ha destacado por pasos inamistosos en relación con nuestro país y los ciudadanos rusos", señaló.

La diplomática denunció que Bruselas continúa incrementando su potencial sancionador en contraposición de las normas internacionales y lo pone en marcha por motivos "inventados", rayando "lo absurdo".

Recordó que Moscú se ha dirigido en varias ocasiones a la UE para que entienda que dicha postura es funesta.

"Pero la UE ignora nuestra propuesta de mantener un diálogo sustancial y profesional sobre la base de hechos y sigue optando por un régimen de sanciones", agregó.

Las tensiones entre Moscú y Bruselas se han disparado en los últimos dos meses debido a las protestas postelectorales en Bielorrusia y el envenenamiento del líder opositor ruso, Alexéi Navalni.

La UE no ha reconocido la victoria del presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, en las elecciones del 9 de agosto y ha apoyado abiertamente a líder opositora en el exilio, Svetlana Tijanóvskaya, quien visitó el martes Bruselas.

En cuanto a Navalni, Alemania y Francia han denunciado el "intento de asesinato" en Siberia con el arma química Novichok y han pedido al presidente ruso, Vladímir Putin, explicaciones sobre lo ocurrido con el opositor.

Algunos países han abogado por paralizar el tendido del gasoducto ruso Nord Stream 2, algo que la propia Alemania, destino de dicho proyecto, no ha descartado.

Rusia, que adoptó por vez primera una lista negra de políticos europeos a mediados de 2015, ya la había ampliado en mayo de 2019.