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FRANCISCO

El papa aprueba la histerectomía cuando el útero no es viable para embarazo

El papa Francisco considera que es "moralmente lícita" la histerectomía (extirpación del útero) en ciertos casos, cuando ese órgano ya no es idóneo para la procreación y existe la certeza médica de que el embarazo no es viable.

Así lo señala una nota ilustrativa publicada por la Congregación para la Doctrina de la Fe en respuesta a una duda moral sobre la extirpación del útero, y que fue aprobada por Francisco con fecha de 10 de diciembre de 2018 y hecha pública hoy.

Ya en julio de 1993 este órgano colegiado de la Santa Sede respondió a las preguntas presentadas sobre el "aislamiento uterino (ligadura de trompas)" y otras cuestiones, respuestas que "siguen manteniendo su validez" pero ahora se completan con una nota ilustrativa que responde a los casos presentados en los últimos años a la Santa Sede.

Entonces se señaló que la extirpación del útero es moralmente lícita cuando el mismo constituye un grave peligro actual para la vida o la salud de la madre, y consideraba ilícitas la extirpación del útero y la ligadura de las trompas con el fin de imposibilitar un posible embarazo que pudiera implicar algún riesgo para la madre.

La diferencia ahora es que los casos presentados al Vaticano se refieren a situaciones en las que ya no es posible la procreación y los médicos expertos han llegado a la certeza de que un posible embarazo conducirá a un aborto espontáneo.

En estos casos, "extirpar un aparato reproductivo incapaz de llevar a término un embarazo no puede ser calificado como esterilización directa, que sigue siendo intrínsecamente ilícita como fin y como medio", afirma la nota hecha pública hoy.

Y es que -subraya- "el objetivo de la esterilización es impedir la función de los órganos reproductivos y la malicia de la esterilización consiste en el rechazo a la prole".

La respuesta no dice, sin embargo, que la decisión de practicar la histerectomía sea siempre la mejor, sino sólo que es una decisión moralmente lícita, sin excluir por ello otras opciones como recurrir a los períodos de infertilidad o a la abstinencia total.