La Unión Africana agradece a España que acoja a los inmigrantes del Aquarius

El presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA), Moussa Faki Mahamat, agradeció al Gobierno de España su ofrecimiento de acoger a los 630 inmigrantes que viajan a bordo del barco Aquarius, de la ONG SOS Méditerranèe, al que tanto Italia como Malta se han negado a recibir en sus puertos.

En un comunicado publicado anoche en la web oficial de la UA, Mahamat elogia al Gobierno español "por dar refugio a más de 600 migrantes, incluidos mujeres y niños, que estaban abandonados en el mar Mediterráneo desde el 10 de junio".

El jefe del Ejecutivo de la UA explica que "los migrantes en peligro, sea cual sea su origen y situación legal, merecen la protección que sea necesaria de acuerdo a las leyes internacionales".

El documento subraya que las fuerzas conjuntas de la organización panafricana, en colaboración con la ONU y la UE, continuará "tomando partido en la difícil situación de los migrantes africanos en Libia", para lo que "seguirá trabajando con las autoridades libias para cerrar todos los centros ilegales de detención de migrantes".

Asimismo, recuerda el objetivo de desmantelar las redes ilegales de tráfico de personas que operan en la región, para lo que pide al Consejo de Seguridad de la ONU que imponga sanciones sobre las seis personas acusadas de encabezar estas tramas en Libia.

El vicepresidente del nuevo Gobierno italiano y ministro del Interior, Matteo Salvini, anunció hace días el cierre de los puertos de su país para el Aquarius, que había rescatado a los inmigrantes frente a las costas libias.

Tras esta negativa, el nuevo presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ordenó este lunes recibir a la embarcación en el puerto mediterráneo de Valencia (este).

El rechazo de Italia a acoger al Aquarius ha suscitado un cruce de reproches entre distintos países europeos, a los que Roma reclama el reparto de los inmigrantes que llegan desde África y la revisión del Protocolo de Dublín, que establece normas para ello.

Italia y Malta son los dos países más cercanos a las costas de Libia, desde donde embarcan buena parte de los inmigrantes africanos que intentan alcanzar Europa.