CATALUÑA
El holograma en 3D, recurso al alza en las campañas políticas a distancia
La inédita campaña para las elecciones autonómicas de Cataluña, con parte de los candidatos fugados o en prisión preventiva, invita a recurrir a novedosas herramientas de comunicación política, y el holograma en 3D se impone como el último grito tecnológico para participar en mítines a distancia.
El entorno del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, fugado en Bélgica desde hace más de un mes y reclamado por las autoridades judiciales españolas, sopesa que el número uno de la lista de "Junts per Catalunya" recurra a los hologramas para aparecerse ante los votantes catalanes. Por ahora, Puigdemont se circunscribe a sistemas más convencionales y el pasado sábado inauguró, en la presentación de la lista posconvergente en la localidad gerundense de Sant Julià de Ramis, sus comparecencias en pantalla gigante a través de videconferencia. Se debe en parte al elevado coste y la complejidad técnica que supone convertir a una persona en un holograma en 3D, un instrumento que irrumpió en la política internacional en 2012. El entonces aspirante a primer ministro de la India, Narendra Modi, inició ese año una serie de apariciones electorales como avatar virtual, experiencia que repitió en 2013 y 2014, cuando llegó a estar al mismo tiempo en 90 mítines en distintos lugares. También en 2014, el entonces primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan se sirvió de la holografía en 3D en su campaña presidencial. Pero no fue hasta febrero de 2017 cuando ese tipo de tecnología llegó a la política europea de la mano del candidato de Francia Insumisa a las presidenciales francesas, Jean-Luc Mélenchon, quien se sirvió de los hologramas para participar simultáneamente en un mitin en Aubervilliers, en la región parisina, y en otro en Lyon, en el Este del país. Mélenchon -que terminó eliminado en la primera vuelta- recurrió a la firma Adrenaline Studio para hacer posible el mitin virtual y pagó entre 50.000 y 100.000 euros por aquella primera intervención, según la cadena de televisión "BFM TV". "Se puede hacer en directo como Mélenchon, por satélite y con un retardo de 1 ó 2 segundos, o grabarlo y difundirlo después", explicó a Efe Nicolás Conde, responsable de la firma Adrenaline Studios, que hace una década empezó a trabajar con esa tecnología desarrollada por sus socios británicos de Musion 3D. Mélenchon volvió a utilizar ese sistema en la misma campaña, en un mitin simultáneo en seis municipios y con un coste total que la prensa francesa situó por debajo de los 300.000 euros. Meses después, el holograma político llegó a Argentina cuando el exministro del Interior y de Transporte Florencio Randazzo recurrió a esa tecnología en su campaña a senador por la provincia de Buenos Aires, apareciendo en dos lugares simultáneos. El coste de la proyección holográfica, que también se conoce como Fantasma de Pepper, requiere instalar un estudio de captación donde se encuentre el orador y desplegar un equipo de proyección donde se difundan las imágenes, explican desde Adrenaline Studio, que precisan de dos meses por proyecto pero se dicen capaces de generar una reencarnación digital en 10 o 15 días "en caso de urgencia". La holografía en 3D, más allá de la política se está convirtiendo en una tecnología cada vez más frecuente en otros ámbitos y se ha empleado ya en homenajes a artistas fallecidos como Michael Jackson, Whitney Houston o Juan Gabriel. También han ejercido de "fantasmas virtuales" para distintos eventos de comunicación o promocionales el príncipe Carlos de Inglaterra, la artista de "strip-tease" Dita Von Teese o el histórico entrenador del Manchester United Alex Ferguson, y se ha empleado también en presentaciones de marcas como BMW, Martini, Burberry o Speedo. El Massachusetts Institute of Technology (MIT), el gigante tecnológico Microsoft o el fabricante de teléfonos móviles Samsung trabajan desde hace años en la miniaturización de un tipo de tecnología llamada a volverse cada vez más frecuente y que muchos conocieron el pasado siglo en la gran pantalla, gracias a la princesa Leia de "La guerra de las galaxias". "La situación es desesperada. Ayúdame, Obi-Wan Kenobi, eres mi única esperanza", decía la actriz Carrie Fisher en un mensaje holográfico grabado en el androide R2D2 para pedir ayuda a un caballero jedi retirado.