Alumbrado es escaso en avenidas, calles y puentes de Santo Domingo

Santo Domingo.- Contrario a todas las capitales del mundo, Santo Domingo, la Ciudad Primada de América, no cuenta con un sistema eficiente de alumbrado público que ilumine sus calles gratuitamente para que sus habitantes se puedan mover tranquilos y seguros durante la noche. No importa que se trate de un barrio marginado, un residencial de adinerados, una arteria comercial o avenida principal, ni siquiera los grandes puentes en la entrada de la ciudad, sobre el río Ozama, tienen iluminación. La autopista Las Américas, el principal acceso para visitantes extranjeros desde el Puerto Multidonal de Punta Caucedo, tiene sólo algunos trechos iluminados. “Lo inexplicable y asombroso es que la entrada de la ciudad, desde la avenida Venezuela hasta los elevados de la 27 de Febrero, no hay una lámpara encendida, ni en los puentes Duarte y Bosch”, se quejó Marcos Bencosme, residente en el ensanche Ozama. Las autoridades alegan que se han robado las lámparas y el cableado de los puentes, pero para Bencosme eso nadie se lo explica, ni ninguna autoridad responde por ello. Citó que en todo el mundo los puentes sobre los grandes ríos son la principal atracción de las ciudades importantes. “Aquí fue así durante mucho tiempo, cuando Trujillo y Balaguer, los puentes sobre el Ozama siempre estaban iluminados y vigilados por militares”, recordó Bencosme. “No puede haber turismo, ni atractivos nocturnos con tanta oscuridad, incluso el Centro Histórico, donde se suponen que pernoctan cientos de turistas, es una cueva de lobos”. Los alrededores de las cabeceras de los puentes Duarte y Bosch, del lado del Dis trito Nacional, están abondonados y no hay iluminación, ni en la Palza de los Trinitarios, ni en la Fuente, que fue por muchos años una gran atracción. “De los letreros lumínicos que daban la bienvenida a los visitantes extranjeros, no queda ni el esqueleto”, dijo Juan Perdomo, un comerciante de la Yolanda Guzmán, cerca de María Auxiliadora. Explicó que colocó cuatro bombillas gigantes en la fachada del colmado para trabajar de noche. “Sin luz en las calles no podemos trabajar seguros, ni ver cuando vienen sospechosos o asaltantes”, dijo. Al igual que en María Auxiliadora, Villa María, Mejoramiento Social y el ensanche Luperón, en casi todos los sectores de la ciudad, la única iluminación que existe en muchas de sus calles son los faroles que ponen los propietarios de pequeños negocios y los vecinos en sus galerías y balcones, porque el alumbrado público hace muchos años es completamente nulo. “Si no fuera por eso y por los vehículos que pasan continuamente, no nos veríamos ni la palma de la mano”, dijo Juan Segura, un cliente de Perdomo. En las grandes avenidas, como John F. Kennedy, 27 de Febrero, Los Próceres, Luperón, República de Colombia, Reyes Católicos, Máximo Gómez, Pedro Livio Cedeño, Padre Castellanos, Hermanas Mirabal y Charles de Gaulle, inclusive en la zona de los grandes hoteles del Malecón de Santo Domingo, la iluminación es escasa en algunos tramos y en otros completamente nula. El sistema de luces del puente Francisco del Rosario Sánchez no funcionan desde hace 15 años, incluso faltan postes que han sido derribados en accidentes o robados por desconocidos. Del lado Oeste, sólo hay quince bombillas alrededor en un parquecito que inauguró hace poco el síndico Roberto Salcedo, pero del lado Este, no hay una sola luz a 500 metros a la redonda de la cabeza del puente, ni en las calles aledañas. (+)MÁS INSEGURIDAD PELIGROS Y DELITOSLa oscuridad en las inmediaciones de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, como en las calles Santo Tomás de Aquino, Correa y Cidrón y Arístides Fiallo Cabral, donde cientos de estudiantes tienen que circular durante la noche, hace el ambiente universitario difícil y peligroso. Aquí como en las calles que rodean a Intec, la UNPHU y otras universidades, no hay lámparas en el alumbrado público. La avenida Los Próceres, desde el Parque Botánico hasta el comienzo de la Luperón, pasando frente a Intec, el alumbrado proviene de letreros lumínicos de empresas privadas, negocios y de los automóviles que circulan. Igual ocurre a todo lo largo de la Pedro Livio Cedeño, desde Aroyo Hondo hasta la Padre Castellanos, y en esta misma vía hasta el puente Sánchez, donde las calles Prolongación Venezuela, San Vicente y la vía de Los Tres brazos, del lado Este, no tienen iluminación desde hace 20 años.