¡Pedid, y se os dará…!

Como base a una actitud de fe, Jesús nos dejó esta reflexión. Preguntó: “… ¿qué padre, que viendo un hijo con hambre, y este le pide alimentos, le da una piedra, en vez de pan. ¿O si le pide pescado, a cambio le da una serpiente?”

Si, siendo vulnerables al error, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos. Cuánto más nuestro Padre Dios, que es bueno y perfecto, cubrirá todas las necesidades.

Porque Dios, está consciente y presente ante cualquier necesidad de sus hijos, sea por problema o enfermedad que padecieren…. “Pedidle al Padre, que El dará”.

Lógico es añadir, que la petición que hagamos deberá estar sustentada en cosas reales, con verdadero propósito y necesidad. Una petición que nos sea a bien, que no dañe a otros- Una petición por demás, cargada de humildad, de aceptación de la Voluntad de Dios.

Muchas son hoy día nuestras necesidades, y Dios las sabe; pero como Padre, quiere que le pidamos, dándole participación y control de nuestras vidas.

Por tanto, Escuchemos la exhortación de Jesús a nosotros, pidámosle con fervor, anhelo y sinceridad a Dios por los hijos, familiares, amigos. Por el mundo y las sociedades, y muy fundamentalmente, por los gobernantes, que se reconcilien en su interior con ellos mismos, ciudadanos y adversarios, y puedan llevar a buen resguardo las naciones.