A LA MODA
Tania Báez presenta su primera propuesta de anillos
Esta colección tiene cuarzo, amatista, obsidiana, rubí, granate, ópalo, ónix, ágata, lapislázuli, citrino, topacio y jaspe.
Ella es una mujer que vive en constante evolución y que siempre se ha destacado por su fuerza, destreza y valentía para enfrentar nuevos retos. Pero, aún así, es un ser humano que pierde y de esas caídas aprende.
Tania siempre va por más. Por eso confiesa que necesita estar envuelta en proyectos para desarrollar, que le apasionen, que la hagan vibrar y la reten a aprender. Diseñar anillos es uno de ellos.
“Desde muy joven tengo fascinación por las piedras en anillos grandes. Se convirtieron en mi sello durante el tiempo que trabajé en televisión y asistía con constancia a distintos eventos. Ahora en redes, muchas personas me escriben preguntando sobre los anillos que luzco en los videos”.
Entonces, motivada por varios seguidores, decidió crear su propia colección de anillos. Hoy, esa línea es el proyecto que, en esta etapa, la llena de retos, aprendizaje e ilusión.
La nombró ‘Alma Libre by Tania Báez’, ¿la razón? “Soy un espíritu libre”, afirma con seguridad. “No me gusta el control ni que me digan qué hacer. Amo la naturaleza y es en el espacio donde me siento más feliz. En el mar, en la montaña, en los ríos, encuentro la conexión perfecta con mi espíritu travieso y aventurero”.
Cuenta que sus hijas bromean con frecuencia y le insisten en que es “un alma libre”. En una de esas ocasiones, pensó que era el nombre perfecto. “Estas piedras, que vienen creadas, son regalos de la naturaleza: cristales y gemas preciosas, por eso merecían ser llamadas con palabras especiales”, dice emocionada Tania.
Las joyas son más que un adorno. Es por ello que, al momento de diseñar, piensa en los diferentes estados en los que la mujer puede encontrarse, en sus emociones, en lo que siente cuando ve piedras.
“Me inspiro en lo que deseo que la mujer que lo lleve sienta. Quiero que conecten con su poder personal, que se anclen en su feminidad. Que disfruten ser vistas cuando lleguen a un lugar y que sus manos llamen la atención. Que gocen tanto esa notoriedad como les pasa cuando están en los espacios a solas en comunión con ellas mismas”.
Además, entiende que usar accesorios que complementen un atuendo es un símbolo de poder y belleza. “Mis anillos me recuerdan que ser mujer es un lujo. Que ser femenina es un poder. Que comunico a través de lo que llevo puesto”, explica orgullosa.
Proceso de diseño y confección
Lo primero es seleccionar las piedras y cristales. Luego, decide la forma para, más tarde, trabajar las bases.
“En esta primera colección, las piezas son hechas a mano por orfebres que cuidan con esmero los detalles. No hay piezas idénticas, todas son distintas”, añade.
Esta colección tiene cuarzo, amatista, obsidiana, rubí, granate, ópalo, ónix, ágata, lapislázuli, citrino, topacio y jaspe.
Que sea un trabajo artesanal hace que cada piedra tenga un tamaño, forma o peso distinto. Esto hace que Tania aprecie más este tipo de joyería, sabiendo que en lo original está lo distinto, y este proyecto tiene esa finalidad: hacer sentir especial a cada mujer. Está convencida de que una joya es una gran obra si la mujer que la luce es segura y consciente de su poder personal.
La comunicadora invita a que estén atentos porque, para Navidad, saldrá una nueva colección dedicada a la época.