Un año con nuevas oportunidades para las familias dominicanas

“Mantenernos unidos y enfocados en un bien común, y reconocer que reflexionar sobre la fragilidad de la vida y el tiempo, ha sido de gran valía para fortalecernos como familia”, dijo la pareja.

Hace unos días, César Augusto Estrella Saldaña y Denisse Espaillat cumplieron 23 años de casados y aún mantienen perenne los valores que los impulsaron a tomar esta decisión, sin obviar el compromiso de una relación de pareja basada en la renovación de un amor sano cada día.

“Mantenernos unidos y enfocados en un bien común, y reconocer que reflexionar sobre la fragilidad de la vida y el tiempo, ha sido de gran valía para fortalecernos como familia”, dijo la pareja.

Esta familia decidió repartir su tiempo, ejercitar la paciencia y sobrellevar los roces propios de la convivencia, sobre todo, por la incertidumbre de no saber por cuánto tiempo permanecerán viviendo este estilo de vida diferente, que puede provocar irritabilidad, frustración, estrés e intolerancia.

Durante la sesión de fotos familiar, al ver la armonía en el rostro de la pareja le pregunte: Cuál es su fórmula como familia para tener dos hijos jóvenes tan alineados y enfocados en sus proyectos de vida, ya que el mayor César Augusto Estrella, estudia Medicina y Sofía Beatriz, imparte clases en un colegio, al igual que su madre.

Cuentan que ha habido ninguna fórmula en particular, sino que llegaron al entendimiento de manera unánime de que era el tiempo propicio para poner en práctica las enseñanzas aprendidas en la Palabra de Dios, reconociendo primero el amor y la Soberanía de Él.

“Fuimos movidos todos, de manera particular, a buscar el propósito de Dios en nosotros como individuos, como familia y para con los demás. Para nosotros este ha sido un tiempo para revisarnos, complementarnos, hacernos conscientes de nuestras debilidades y fortalezas, para ser apoyo unos de otros como familia”, dijo.

En su hogar, con hijos adultos procuran dividir sus responsabilidades y asumirlas.

“Los valores sembrados deben aflorar ahora y dar abundante fruto. La vida se ha complicado y es necesario ser intencional. Cada miembro debe velar por el otro, servir con amor, ejercitarse en la gratitud, valorar el esfuerzo del otro y actuar de manera responsable”, sostienen.

Para ellos este año, las familias deben estar unidas y reforzar lazos, enmendar y sanar heridas, procurando diligentemente mantener la esperanza viva de un año con nuevas oportunidades, detalles, experiencias y bendiciones.

Dios debe ser el eje de nuestras vidas, la Palabra nos asegura que en el mundo tendremos aflicción, pero también en ella encontramos medicina para el alma abatida y propósito.

“No estamos exentos de padecer tormentas, pero si permanecemos en la barca, con Jesús, podremos ver con ojos diferentes lo que nos acontece. Valorar los tiempos juntos, agradeciendo los grandes y pequeños detalles que el Padre nos concede, nos brinda aliento para que no sucumbamos ante las grandes turbulencias”, expresaron.

Retos de las familias

1. Comprensión y entendimiento 24/7 2. Necesidad de coordinar actividades y gustos.

3. Fomentar la necesidad y deseo del contacto afectivo con padres y abuelos. 4-

4.Expresar amor con palabras y detalles.

5. Necesidad de ayudarnos con nuestros temores, confusión y falta de información, sobre todo al principio.