OBESIDAD

Obesidad: una enfermedad multifactorial que amerita abordaje interdisciplinario

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Jaclin CamposSanto Domingo, RD

Muchos especialistas consideran la obesidad como una enfermedad crónica. Tal es la preocupación en torno al exceso de peso corporal y sus múltiples consecuencias para la salud.

No obstante, el sobrepeso y la obesidad continúan aumentando en todo el mundo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el número de personas obesas casi se ha triplicado desde el año 1975 ¿A qué se debe este aparente fracaso en la batalla contra la epidemia? Según el cirujano argentino Ignacio Sajoux y la médico familiar española Ana Bellón, en la obesidad inciden múltiples factores y, por ende, en su abordaje se debe tomar en cuenta esta realidad.

“La obesidad es un problema multifactorial”, dice Sajoux. “Tiene una predisposición genética, una predisposición ambiental y una predisposición psicológica”.

El médico e investigador asegura que las estrategias “estándares” (las dietas hipocalóricas, las cirugías para reducir la capacidad del estómago y los fármacos) no están contribuyendo a reducir el incremento en los índices de sobrepeso y obesidad a escala mundial.

Como la enfermedad tiene un origen multicausal, agrega de su lado Bellón, el paciente necesita apoyo desde varios ámbitos a fin de deshacerse del exceso de peso.

“El tratamiento de la obesidad exige un equipo de muchas personas para ayudar a ese paciente a llegar a su objetivo e implica la motivación y la implicación directa del paciente. El tratamiento multidisciplinar es fundamental”, explica la doctora y conductora de televisión.

Ansiedad y estrés

La ansiedad y el estrés, que también tienen visos de epidemia, inciden en el incremento de peso, de acuerdo con los expertos.

“Solo el hecho de dormir mal y estar estresado condiciona el incremento del peso, y esto en la sociedad en la que vivimos hoy le pasa a todos”, señala Sajoux.

Esto se conjuga con otras condiciones como la disminución de la actividad física y un mayor poder adquisitivo que amplía el acceso a alimentos procesados.

“Este incremento en el consumo calórico, la disminución del gasto, más un entorno de estrés y ‘pro obesógeno’ en torno al consumo de comidas con hidratos de carbono y procesadas, es una bomba de tiempo”, argumenta Sajoux.

Rol del Estado

Con el objetivo de reducir la obesidad en la población, varios países han aprobado normativas que regulan la venta y el etiquetado de alimentos preenvasados y preempacados.

Sajoux comenta que medidas como la aplicación de aranceles a bebidas con altos porcentajes de hidratos de carbono están funcionando bien.

“La concienciación por parte de la población de disminuir el consumo de azúcares refinados es una de las estrategias de evitar el incremento del peso”, expresa el médico.

Ignacio Sajoux y Ana Bellón estuvieron en República Dominicana para participar en el Simposio Internacional de Obesidad Pronokal Group.