La leyenda de la Torre del Diablo

Las opciones viajeras de este año que inicia vienen extremas, de búsqueda de nuevos exóticos destinos a descubrir, como una visita al noreste de Wyoming, en Estados Unidos, para conocer la Torre del Diablo, un monumento nacional ubicado en el condado de Crook que de lejos refleja hermetismo y curiosidad.

Si es amante del cine, por ejemplo, habrá notado que la figura de este cuello volcánico aparece en la película “Encuentros cercanos del tercer tipo”, el famoso punto de encuentro entre humanos y extraterrestres imaginado por el director Steven Spielberg.

La roca se levanta 386 metros del terreno y a 1,558 metros sobre el nivel del mar y tiene una importancia de nación: establecido en septiembre de 1906 durante la presidencia de Theodore Roosevelt, el ‘Devil’s Tower’ o Torre del Diablo fue el primer monumento nacional declarado de Estados Unidos.

Se cuenta que los primeros valientes en alcanzar la cima de la roca fueron los rancheros William Rogers y Willard Ripley, quienes en 1893 clavaron tacos de madera en la roca hasta construir una escalera que se usó con estos fines hasta 1927. El monumento y sus alrededores tienen una superficie de 5,45 kilómetros cuadrados. La torre está formada por rocas ígneas ‘fonolíticas’ intruidas hace 40,5 millones de años.

La leyenda Sobre el río Belle Fourche, la intrusión ígnea “Devil’s Tower” es un imponente monumento natural, pero ¿qué cuenta la leyenda sobre el origen de esta enigmática formación rocosa? En el lenguaje lakota, el nombre que recibe la roca es Mato Tipila (aposento del oso), y está relacionado con la historia que rodea el lugar y que explica su forma.

Dice la leyenda que algunas chicas que jugaban en el lugar se toparon con osos gigantes y que estos las persiguieron. Viendo el caso perdido, a las jóvenes solo se les ocurrió subirse a una roca y orar de rodillas pidiendo ser salvas. Las oraciones, dirigidas al Gran Espíritu, surtieron efecto. La leyenda señala que el Gran Espíritu las escuchó y elevó la roca hacia lo alto para que de esta manera los osos no pudieran alcanzarlas. ¿Ven las marcas en forma de columnas? Dicen que las hicieron los osos mientras intentaban, en vano, alcanzar la cima de la roca.

Atractivo

Cerca de medio millón de personas visitan anualmente el monumento y cada vez más se deciden a escalarlo. La escalada moderna más memorable ocurrió en 1937 y se le atribuye a Fritz Wiessner, cuya cima alcanzó junto a William P. House y Lawrence Coveney.