República Dominicana figura entre los cinco países de Latinoamérica con más feminicidios
Los feminicidios en el país siguen siendo una problemática que cada año alcanza cifras alarmantes, por tal razón la República Dominicana figura como el quinto país en Latinoamérica con más feminicidios, así lo afirmó Sven Pfeiffer, oficial de Prevención del Delito y Justicia Penal de la Office on Drugs and Crime (Unodc por sus siglas en inglés).
“República Dominicana es el quinto país de América Latina con más alto índice de feminicidios, 2.7 por cada cien mil habitantes, por eso necesita más disponibilidad del personal, accesibilidad, capacidad y calidad de respuesta, hay poco espacio en las casas de acogida, los lugares para atender las denuncias son inadecuados, además no hay retroalimentación de las personas atendidas”, detalló Pfeiffer.
La estadística fue presentada en una reunión sostenida con el ministro de Interior y Policia Jesús Vásquez Martínez (Chu), La viceministra de Seguridad Preventiva en los Gobiernos Provinciales, Ángela Jáquez; entre otros representantes estatales.
En el encuentro fue presentada la estrategia “Violencia Intrafamiliar y Acceso”, que empieza en los siete municipios de Santo Domingo, la de mayor índice de muertes (25 % – 37 % en los últimos 22 años).
Durante el acto la viceministra indicó que el plan que será extendido a todo el país cuenta con el respaldo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) por una mayor integración de la justicia y de los actores encargados de proteger a la mujer, como la Policía, el Ministerio Público y el Congreso.
Representantes estatales y ejes de la estrategia
Los representantes estatales asumieron este proyecto, entre estos la general Celeste Yanet Jiménez Cabral, titular de la Dirección Especializada de Atención a la Mujer y Violencia Intrafamiliar de la Policía, quien indicó que trabajan en cuatro ejes, que han permitido la ejecución de 71 % de las órdenes de arresto, algo sin precedentes contra la impunidad.
Estos ejes son atención integral a las víctimas, custodiarla en centros de salud cuando ha sido herida, facilitar acceso a la justicia, y trabajo mancomunado con el Ministerio de la Mujer en casas de acogida.