Mapache: “El rey de los ladrones de basura” que esconden en Cristo Rey
Las personas suelen reconocerlos por sus huellas similares a las manos de un niño
Un mapache ha sido visto en varios sectores de Santo Domingo desde el pasado jueves, desde entonces el país sorprendido se pregunta de dónde salió el animal, cómo llegó hasta Cristo Rey donde están pidiendo una recompensa para liberarlo, y qué peligro representa para la ciudadanía.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales ha dado la voz de alerta a la población de que este animal es portador de enfermedades que pueden ser perjudiciales para los humanos y las mascotas.
Pero, ¿qué es un mapache y cómo se comporta?
Su nombre proviene de la palabra “Mapachtli” de la lengua náhuatl que significa “el que toma todo en sus manos” y precisamente esa es una de las principales características del animal: agarrar cosas con sus hábiles extremidades.
El mapache es una especie de mamífero de la familia de los prociónidos. Es omnívoro y carroñero, pueden comer desde crustáceos hasta peces y nueces. Su versatilidad en la alimentación puede deberse a sus cuarenta dientes adaptados a este tipo de dietas.
En un tamaño mediano, pueden pesar entre 5 y 15 kilogramos, no obstante algunos pueden llegar a alcanzar los 28 kilogramos.
Físicamente se caracterizan por su pelaje gris, marrón o negro. También tienen una coloración oscura alrededor de los ojos y en la cola se forman “anillos” al mezclarse diferentes tonalidades.
En estado salvaje, pueden vivir hasta aproximadamente 12 años, mientras que en cautividad su esperanza de vida se extiende hasta los 20.
¿Dónde viven?
Es una especie muy común en Norteamérica, sin embargo pueden tener presencia en algunos países de América Latina.
Su hábitat original son los bosques mixtos o caducifolios, asociados a humedales y arroyos.
La densidad de sus poblaciones puede sobrepasar los cien ejemplares por kilómetro cuadrado debido a su gran capacidad de adaptación en diversos entornos, sus hábitos alimentarios omnívoros, su alto potencial reproductivo y la ausencia de predadores.
“El rey de los ladrones de basura”
Los expertos señalan que los mapaches se han adaptado a vivir en áreas urbanas a través de los años, donde incluso pueden alimentarse de basura y comida para mascotas. Esta capacidad les ha concedido el título de “especie invasora”.
Las personas suelen reconocerlos por sus huellas similares a las manos de un niño.
El mapache es muy hábil con sus patas delanteras y las usa como si fueran manos. Sus extremidades le sirven también para agarrar comida y diversos objetos.
Pueden volverse agresivos
Cuando son acosados por humanos o animales domésticos, los mapaches pueden presentar un carácter muy agresivo.
Fuera de sus ecosistemas individuales, pueden causar graves daños, ya que se trata de animales “oportunistas” capaces de cazar y amenazas ecosistemas y especies autóctonas.
Cabe señalar que estos animales no son aptos para la domesticación ni la convivencia, pues son de hábitos nocturnos y puede tornarse agresivo.
Transmite enfermedades
La rabia, a través de mordeduras o rasguños, es una de las múltiples enfermedades que transmiten los mapaches. Otra es la baylisascariasis, una infección letal del sistema nervioso central (SNC).
La ascariasis, la salmonelosis y leptospirosis son otras afecciones con riesgo de transmisión.