Sacerdotes de Dajabón deploran manera en la que se realizan las repatriaciones de haitianos
Denunciaron el trato “violento” y “humillante” que reciben los extranjeros indocumentados en los operativos de migración
Un grupo de sacerdotes de la iglesia Católica en la provincia de Dajabón deploró, a través de un comunicado, la forma en la que las autoridades dominicanas realizan los procesos de repatriación a haitianos.
Asimismo, calificaron de “violento” y “humillante” el trato que reciben los extranjeros indocumentados en los operativos de migración.
Aunque reconocen que el Gobierno tiene todo el derecho de repatriar a cualquier persona que no esté regulada y resida en territorio dominicano, los representantes del clero aseguraron que debe existir un protocolo que respete la dignidad de los migrantes.
“El país tiene derecho a organizar sus fronteras y a hacer cumplir la ley de migración, a lo que no tienen derecho es a violar los derechos fundamentales de las personas”, señalaron.
Asegurando ser testigos de muchas irregularidades y faltas de protocolo en las repatriaciones, los religiosos denunciaron que “hay deportaciones de niños con arraigo social en la República Dominicana” y que algunos de estos menores no están acompañados cuando son conducidos a la frontera.
Cuestionaron además que cualquier uniformado puede detener una persona migrante y que esta práctica está fomentando el “macuteo” y promoviendo el miedo.
Asimismo, los sacerdotes denunciaron que los centros de detención no cumplen con ninguna condición que garantice la dignidad humana. Según expresaron, estos carecen de baños, muebles para sentarse o dormir, acceso a agua o comida.
“A esta situación son sometidos tanto niños como mujeres embrazadas y madres lactantes”, agregaron.
Los curas manifestaron en el comunicado que esta situación deja en evidencia que el gobierno tiene un grave problema con el tema migratorio y que “la única solución que se brinda son las repatriaciones, cuando eso se soluciona con la regularización”.
En tal sentido, pidieron al gobierno detener las deportaciones masivas, crear centros municipales para la regularización de migrantes y mejorar la infraestructura de los centros de detención.
El documento está firmado por los sacerdotes Roberto Guzmán, de la Parroquia Nuestra Señora del Rosario, Osvaldo Concepción, coordinador del Centro Montalvo, Aquiles Ozuna, director de Radio Marien y José Núñez “Chepe”, director del Instituto Tecnológico San Ignacio de Loyola.