Cuadruplicar número de psiquiatras es una prioridad para atender la salud mental
El presidente de la Sociedad Dominicana de Psiquiatría, doctor Julio Chestaro, sostiene que, además de la cantidad, se requiere que estén mejor distribuidos en todo el país.
El doctor Chestaro citó que en el Cibao, como servicios privados hay dos centros, uno en Santiago y otro en San Francisco de Macorís, lo que indica que hace falta mucho más.
Dijo que en La Vega, donde ejerce su profesión, no tiene una unidad de intervención en crisis privada, pero los psiquiatras ingresan cierto tipo de pacientes en las clínicas donde trabajan.
La falta de especialistas de la psiquiatría forma parte del rosario de debilidades de la atención en salud mental del país.
Se estima que el país tiene unos 260 médicos psiquiatras, de los cuales algunos no están activos, pero de los existentes, cerca del 70% se concentra en el Gran Santo Domingo y Santiago.
Partiendo de los estándares internacionales, el país necesitaría cuatro veces más la cantidad de psiquiatras con que cuenta para atender las necesidades de la población, pero que estén bien distribuidos a nivel nacional.
En esa afirmación hace énfasis el doctor Julio Chestaro, presidente de la Sociedad Dominicana de Psiquiatría.
Lo ideal, explica, es que cada municipio cabecera tenga por lo menos un profesional de la psiquiatría, lo cual ahora mismo está muy lejos de cumplirse en el país.
Chestaro dijo que el país cuenta con 260 psiquiatras, que, aunque no son suficientes, lo peor es que están mal distribuidos, ya que la mayoría están concentrados en el Gran Santo Domingo y Santiago, dejando provincias enteras sin el servicio.
13 por cada 100 mil “Se calcula que aquí tenemos un psiquiatra por cada 100 mil habitantes, y el promedio internacional anda entre 13 y 14 psiquiatras por cada 100 mil habitantes”, señala Chestaro y agrega que eso indica que para atender la población se necesitan cuatro veces la cantidad de psiquiatras con que cuenta República Dominicana.
“Necesitamos más psiquiatras, pero no para que estén en el mismo sitio, porque hay zonas del país que no tienen esos especialistas, lo que ocurre es que todo el que se gradúa se quiere quedar en la capital o en las grandes ciudades”, explica.
Sobre la realidad de la red pública, dijo que en el sector público hay muchos psiquiatras prestando servicios, pero que en los últimos años algunos han fallecido, otros han sido pensionados o se han retirado y no han sido repuestos en nómina por otros profesionales del ramo, mientras que hay algunos que están trabajando como psiquiatras en hospitales, pero su designación es como médico general u otra categoría.
Otras figuras El especialista entiende que si se quiere dar una cobertura en todo el país, se necesita que los servicios de atención psiquiátricas no se concentren solamente en las Unidades de Intervención en Crisis, sino que haya otro tipo de respuesta, como servicios de consultas con psiquiatras, psicólogos y terapeutas ocupacionales, hospitales de Día y centros comunitarios de salud mental.
Debe haber, explicó, servicios de seguimiento a esos pacientes que se van de alta, porque a veces conseguir una cita en el hospital para darle seguimiento a un paciente que se va de alta se debe esperar hasta cinco semanas.
“Lo ideal sería que cada municipio cabecera de provincias tuviera una unidad de intervención en crisis, ya que fuera de Santo Domingo, hay una en el hospital San Vicente de Paúl de San Francisco de Macorís, el José María Cabral y Báez, de Santiago y una en Puerto Plata, y que la provincia de La Vega sólo tiene cuatro camas asignadas a salud mental.
Explica que la mayoría de los psiquiatras ingresan sus pacientes privados en las clínicas donde laboran, y que hay centros de recuperación y unidades de atención en crisis en algunas clínicas y también hay clínicas privadas de salud mental.
Sector privado En el sector privado, explicó el doctor Chestaro, hay clínicas y centros de tratamiento, casas de recuperación, incluyendo varias de ellas en el Gran Santo Domingo. “A nivel privado el tema es que muchos de los servicios están centralizados en pocos lugares”, citando varias provincias.