Senasa cubrirá prótesis que necesita ebanista José Miguel
Dos profesores del ITLA muestran una de las prótesis que elabora la entidad. EXTERNA
El Seguro Nacional de Salud (Senasa) cubrirá el diseño y elaboración de la prótesis que necesita José Miguel Rodríguez Polanco, quien perdió la pierna izquierda en un accidente de motocicleta cuando tenía catorce años.
Rodríguez Polanco reveló a LISTÍN DIARIO la semana pasada los retos que enfrenta cada día en su oficio de ebanista por la falta de una prótesis y por una diabetes grado dos que le detectaron hace cinco años.
“Me siento muy agradecido”, expresó sobre la prótesis que finalmente le permitirá desplazarse y trabajar con mayor soltura, así como por las ayudas que ha recibido para costear su tratamiento para la diabetes de personas que se han solidarizado con su situación, luego de que su historia saliera publicada en LISTÍN DIARIO.
Contacto
Lissy Shakyra Méndez, en representación de Senasa, contactó a José Miguel, para iniciar los trámites de documentación, recomendación y evaluación médica que se requieren antes del diseño y elaboración de la prótesis.
Senasa mantiene un acuerdo con el Instituto Tecnológico de las Américas (ITLA) para el diseño y elaboración de prótesis mediante el proyecto Protoscanner 3D.
La alianza entre ambas entidades, con el acompañamiento médico del Hospital Militar Dr. Ramón de Lara, el Centro para la Salud Integral ILAC y el apoyo de la primera dama Raquel Arbaje, permite desarrollar una línea de investigación para el desarrollo, fabricación colocación y seguimiento rutinario de prótesis transtibiales, transfemorales y de mano.
Proceso de diseño
El proceso de diseño implica escanear 3D el muñón del paciente, donde se ha realizado la amputación, se adaptan mediante un software CAD (Computer-Aided Design) y se convierten directamente en un archivo listo para impresión 3D.
El desarrollo de la impresión 3D ha evolucionado significativamente durante las últimas décadas en cuanto a la fabricación de prótesis, ya que esta técnica ofrece muchas posibilidades para el desarrollo de prótesis a la medida y con mucha precisión.
Rodríguez Polanco, ahora con 35 años y padre de tres hijos, trabaja como ebanista, aunque no a tiempo completo porque necesita la prótesis para encarar sus actividades cotidianas y el oficio que le permite aportar a la manutención de su hogar.
Para trabajar como ebanista, José Miguel apoya el muñón de la pierna amputada en un pequeño tanque de cartón.
En el taller confecciona todo tipo de muebles, pero su especialidad son closets, puertas y gabinetes.
Rodríguez Polanco reside en la calle Dos, casa número uno del barrio San José de la Mina, en Santiago.
Deterioro
La prótesis que usó poco después del accidente se la donó la compañía propietaria del camión con el que chocó, pero se la colocaron cuando era un adolescente y ya no le sirve, además de que se deterioró por el prolongado uso.
“Necesito esa prótesis para trasladarme a mi trabajo y realizar mi labor en mejor condición”, manifestó a LISTÍN DIARIO José Miguel, quien se auxilia de un compañero de trabajo que lo lleva al taller donde labora, ubicado a unos tres kilómetros de su vivienda.
“Eso es lo que sé hacer. Ese es mi día a día y mi medio de sustento”, expresó sobre los riesgos que enfrenta por su oficio y su condición de diabético, ya que regularmente corta maderas en una sierra eléctrica.
SEPA MÁS
Desde temprana edad en oficio
Reto.
José Miguel incursionó en la ebanistería desde los 13 años por iniciativa del esposo de una tía que le enseñó, pero después del accidente un año después se esforzó mucho más por dominar el oficio. Ahora, para trabajar como ebanista, apoya el muñón de la pierna amputada en un pequeño tanque de cartón.
