El periodismo de soluciones

Periodistas de todo el mundo están trabajando las 24 horas para brindar a los lectores informes completos y actualizados sobre la pandemia global de COVID-19. Gran parte de esa cobertura se centra en la realidad de la crisis: lo que está sucediendo, lo que se puede esperar y las nuevas directrices emitidas por gobiernos locales y nacionales. Ante la constante evolución de la información y las noticias sobre la pandemia, el periodismo de soluciones no solo es útil, sino esencial, dice a IJNet Linda Shaw, directora editorial de la Red de Periodismo de Soluciones.

Publicaciones como esta de CNN, sobre cómo Corea del Sur ha sido pionera en sistemas de testeo que han aumentado el acceso a las pruebas de COVID-19 y minimizado el riesgo de contaminación para los trabajadores de la salud, son ejemplos de lo mejor del periodismo de soluciones: coberturas basadas en la evidencia acerca de respuestas a problemas sociales. “Se trata de coberturas importantes”, dice Shaw. “También pueden ser historias que creen conciencia al mostrar prácticas que están funcionando en otros lugares y que plantean la pregunta de por qué no estamos aplicando tales prácticas en nuestra comunidad.

Claves para un buen periodismo de soluiones

La Red de Periodismo de Soluciones está apoyando a los periodistas para que trabajen en artículos orientados a soluciones. La red abrió un canal de Slack para compartir ideas y recibir comentarios sobre cómo adoptar el enfoque en relación al COVID-19, y organizará un seminario web sobre periodismo de soluciones en abril. También está solicitando ideas para coberturas, y ha comenzado a reunir buenas coberturas ya hechas en el Solutions Story Tracker.

Si bien el COVID-19 es una pandemia, cubrir las respuestas locales es importante para contar toda la historia de lo que está sucediendo en una comunidad, explica Shaw.

Un ejemplo de cobertura local respecto del combate del COVID-19 es la pieza “Coronavirus: líderes de Filadelfia toman medidas por la falta de información en otro idioma que no sea inglés”, publicada en Kensington Voice, un medio bilingüe e hiperlocal. La historia fue parte del informe colaborativo Broke in Philly, que produce periodismo orientado a soluciones sobre la pobreza y la movilidad económica en la ciudad.

El artículo explora las acciones de los líderes en las comunidades de habla hispana para abordar la falta de información sobre el COVID-19 en español y otros idiomas ampliamente hablados, como el chino y el vietnamita. Esa información es vital para casi el 25% de la población de la ciudad.

Proyectos colaborativos para descubrir el Coronavirus

Los esfuerzos para abordar el problema en Filadelfia tienen implicaciones a nivel nacional. Como el periodista Julio Ricardo Varela escribió en Latino Rebels y NBC News luego documentó, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades y la Casa Blanca se han quedado muy rezagados en la distribución de información sobre pautas básicas del coronavirus en español, hablado por más de 40 millones de personas en los Estados Unidos, sin mencionar otros idiomas.

El periodismo de soluciones no se trata solamente de ser “positivo”. Los periodistas deben aplicar un estándar riguroso para profundizar en las soluciones que se implementan y en los muchos problemas asociados con esos esfuerzos. Para Shaw, esto significa que el trabajo de reportero debe dejar claro lo que sabemos y lo que no sabemos, y debe dar seguimiento a cualquier cambio a medida que se desarrolle la situación.

“El objetivo general es compartir ideas y lecciones”, dice. También es importante distinguir entre periodismo de soluciones y la cobertura de respuestas inmediatas o historias conmovedoras, señala Shaw.

Por ejemplo, CNN publicó un artículo sobre las tiendas que tienen horarios de compras exclusivos para personas mayores. No se trata de un ejemplo de periodismo de soluciones ya que, hasta ahora, no hay evidencia de que esa respuesta realmente ayude a contener el virus o proteger a las personas mayores. En la misma línea, las historias sobre ciudadanos en Italia y España cantando desde sus balcones o aplaudiendo a los trabajadores de la salud, aunque alentadoras, no son historias de periodismo de soluciones porque no describen una respuesta sistémica al problema. Eso no significa que no valga la pena cubrir tales situaciones para comprender mejor cómo una comunidad está respondiendo a la crisis, dijo Shaw. “Puede haber muchas razones para hacer esa historia incluso antes de que la evidencia esté disponible, sea una historia de soluciones o no”, dijo.

Si el periodismo de soluciones es una novedad para ti o no sabes por dónde comenzar a cubrir la pandemia, Shaw comparte cuatro elementos clave:

Céntrate en profundidad en una respuesta específica a un problema social.

Explora cómo se implementa la respuesta y cómo funciona.

Examina la evidencia, tanto cualitativa como cuantitativa, de lo que se sabe hasta ahora sobre la efectividad de la respuesta.

Explica las advertencias y limitaciones de la respuesta.

Para conocer las bases del periodismo de soluciones entra a las herramientas de la Red de Periodismo de Soluciones aquí (en inglés).