Quejas
Procuraduría demuele “carcelita” del Palacio de Justicia de la Charles
Ayer destruyeron la llamada “carcelita” de la Fiscalía para construir otra de condiciones adecuadas para los privados de libertad. RAÚL ASENCIO/LISTÍN DIARIO
La Procuraduría General de la República demolió ayer la "carcelita" del Palacio de Justicia de la avenida Charles de Gaulle, de Santo Domingo Este, debido a las condiciones precarias del lugar, y a la insalubridad y hacinamiento en que se encontraban los presos.
Un personal acudió temprano en la mañana a la pequeña cárcel que funciona en el patio de la Fiscalía de esa jurisdicción y comenzó a demolerla, mientras que un camión se encargaba de recoger los escombros.
Mientras que 25 presos que se encontraban en la “carcelita” a la espera de que se les conociera medidas de coerción en el Juzgado de Atención Permanente de esa jurisdicción y que funciona en un furgón, fueron montados en un vehículo y llevados a la nueva cárcel preventiva de San Luis, puesta en funcionamiento recientemente.
Julieta Tejada, directora de comunicaciones de la Procuraduría, dijo que la "carcelita" será remodelada, tras señalar que esto forma parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario Nacional.
Sostuvo que el espacio será mejorado y no eliminado, ya que es un lugar que se utiliza de forma provisional para los presos a los que les conocerán las medidas de coerción o las esperas de ser trasladado a la cárcel de San Luis, luego de que se le haya impuesto prisión preventiva.
La prisión sobre la cual el Listín Diario realizó una serie de reportajes describiendo sus condiciones deplorables y la forma inhumana en que estaban los reos, estaba construida en menos de 100 metros cuadrados.
Antes de ser puesta en funcionamiento la cárcel de San Luis, que funcionaba en una pequeña capilla y en condiciones precarias, en la "carcelita" había entre 70 y 100 presos en condiciones deplorables.
La “carcelita” funcionaba sin ventiladores, ni ventana, lo que obligaba a que los detenidos tuvieran que permanecer semidesnudos, debido al sofocante calor que había en su interior.
En los barrotes de la “carcelita” se observaba ropas tendidas y en la entrada de la puerta principal fundas plásticas negras con todo tipo de desperdicio, además de las botellas de agua con orina, así como las de jugo en el suelo.