REFLEXIÓN
Hoy es día de la Reforma Protestante
Fue en ese momento que nuestro Dios y Salvador Jesucristo abrió las puertas para que se produjera la revolución religiosa mas importante en toda la historia de la humanidad, en la que una incalculable cantidad de personas pudieron conocer sobre la gracia y misericordia del Eterno que envió a su Hijo Jesucristo “para que todo aquel que en Él crea no se pierda mas tenga vida eterna”.
La Reforma Protestante que celebra este martes 31 de octubre sus 500 años de aniversario, refleja, desde su inicio, la necesidad de un verdadero y profundo desarrollo integral y espiritual por y en la persona de nuestro Señor Jesucristo.
El entonces monje Martin Lutero, auspiciador de la Reforma, cuando conoció a Cristo como su Señor y Salvador, lo que produjo una revolución espiritual en el mundo, al descubrir que la salvación del alma es por la fe en el Hijo de Dios y no por obras, como dice en Efesios 2:8.
Por lo que es necesario integrar nuestras vidas a una verdadera y profunda reforma en el espíritu de las personas, incluyendo a nuestros líderes, protestantes, evangélicos y cristianos, quienes dirigen los cinco ministerios del evangelio de Jesucristo, quienes son compromisarios de la verdadera unidad de la iglesia de Jesucristo en nuestras sociedades.
Urge estos cambios en los tiempos en que nos ha tocado vivir, con una serie de influencias anti cristianas, donde a lo malo se le dice bueno y a lo bueno malo, por lo que es necesario la predicación del Evangelio de Salvación de Nuestro Señor Jesucristo, tal como lo enseña la Biblia, la Palabra de Dios, no caer en la terribilidad de la apostasía que el mundo está viviendo en estos momentos.
Es por eso que procuramos elevar el asta de la victoria de nuestro Señor Jesucristo en la cruz del calvario como vencedor y Rey de reyes y Señor de señores, cuyo liderazgo de victoria están en sus manos, y nosotros como sus siervos estamos obligados a trabajar llevando su palabra por todo el mundo, lo que siempre ha sido y será la posición de TABERNACULO PRENSA DE DIOS.